La oferta del cercanías prevé el empleo de trenes Civia con capacidad para 461 personas, de las que 169 podrán ir sentadas. La línea entre Alcolea y Villarrubia tendrá 5 o 7 estaciones (si se construyen las dos pendientes) y una longitud de 23,4 kilómetros. Un trayecto completo se cubrirá en 25 minutos y, según los horarios y calendarios previstos inicialmente por Renfe, la mitad de las expediciones solo funcionarían de lunes a viernes. La alcaldesa, Isabel Ambrosio, ha solicitado al Ministerio de Fomento y a Renfe trabajar de manera coordinada con el Ayuntamiento de Córdoba para establecer horarios y combinarlos con los que actualmente hay para Rabanales. Una de las propuestas que se hizo pasaba por que en el plazo de dos años, superado un periodo de prueba, se deberían ir incrementando los trenes hasta alcanzar las frecuencias de Córdoba a Rabanales.

La elaboración de un estudio sobre la movilidad con la puesta en marcha del cercanías fue una de las propuestas de la comisión creada por el equipo de gobierno para decidir si retomaban el proyecto del tren iniciado por el PP (entonces llamado metrotrén) o si se descartaba. El objeto del estudio de movilidad no era trasvasar viajeros del autobús al tren sino captar viajeros que usan habitualmente el vehículo privado para hacer estos trayectos (un 90%).

Las medidas complementarias que se proponen se dividen en tres directrices: integración tarifaria y creación de líneas lanzaderas de Aucorsa (para no penalizar el trasbordo); la construcción de aparcamientos disausorios (que ya está llevando a cabo el Ayuntamiento), y la mejora de la accesibilidad en bicicleta (con la construcción de aparcamientos vigilados). La aplicación de estas medidas prevén incrementos acumulativos de viajeros.