El 29 de octubre pasará a la historia como el día en el que Córdoba estrenó el tan demandado tren de cercanías entre Alcolea y Villarrubia, al que aún le queda mucho por mejorar, principalmente, porque es un media distancia. En realidad Córdoba ya contaba con ese servicio pero solo entre su estación central y el campus universitario de Rabanales. Sin embargo, desde esta semana hay disponibles tres estaciones más, que fueron renovadas por el ADIF hace tres años, las de Villarrubia, El Higuerón y Alcolea, por lo que esas barriadas están conectadas ahora, además de por coche y autobús, por un tren que recorre la distancia que las separa en solo 25 minutos. Un día después, el 30, de la terminal ferroviaria de El Higuerón partía otro tren, esta vez de mercancías, cargado de contenedores de la naviera MSC, con productos agrarios, entre ellos, vino y aceite de oliva, con destino al puerto de Valencia para, desde allí, tomar rumbo hacia el resto del Mediterráneo, Oriente Medio o al Lejano Oriente.

Casi una fiesta

El día del estreno del cercanías se vivió casi como una fiesta y hasta se brindó con champán. No era para menos. Córdoba llevaba esperando desde hace seis años que el tren propuesto por el anterior alcalde, José Antonio Nieto (PP), y anhelado desde mucho antes, empezase a circular. La plataforma Metrotrén ¡Ya! brindó ante la estación central y se subió al tren, que también cogieron la alcaldesa, Isabel Ambrosio (PSOE); la subdelegada del Gobierno, Rafaela Valenzuela (PSOE); el primer teniente de alcalde, Pedro García (IU); concejales de ambos partidos y de Ciudadanos; y los candidatos número uno y dos al Parlamento de Adelante Andalucía, Ana Naranjo y David Moscoso. Ese día, y en las horas punta, los estudiantes abarrotaban los vagones en el trayecto Córdoba-Rabanales, al igual que siempre ha ocurrido. Sin embargo, y quitando a políticos y periodistas, el resto del recorrido ofrecía una imagen distinta y con pocos usuarios. Eso sí, todos los que se subían, ya sea en Alcolea, en El Higuerón o en Villarrubia, se mostraban encantados y felices por contar con un medio de transporte más.

Sorpresas

El estreno dio alguna que otra sorpresa. Además de los despistes propios del primer día, los usuarios de cuatro vehículos de horas punta procedentes de Villarrubia y Alcolea se encontraron que debían hacer transbordo en la estación central para subirse a un tren de doble composición parado allí y repleto de estudiantes que se dirigían a Rabanales. A pesar de ello, el cambio de tren no tuvo gran incidencia.

El día 1 de noviembre, primer festivo del cercanías, su aspecto difería del ofrecido con los estudiantes de Rabanales llenándolo de vida. Ese día, el tren se convirtió en un medio para unir las barriadas con la ciudad por motivos de ocio. Los residentes de las barriadas tenían ya la oportunidad de acercarse a Córdoba por puro placer y en pocos minutos sin necesidad de coche.

Los primeros usuarios

Desde el día 29, y hasta el 1 de noviembre, el tren fue utilizado por 14.058 viajeros, según el balance ofrecido por Renfe, que avisa de que aún es muy pronto para evaluar la demanda, para lo que hace falta esperar unos meses. De esos 14.058 viajeros, 798, es decir, un 5,6%, son los que se subieron o bajaron en alguna de las nuevas estaciones (Villarrubia, Alcolea o El Higuerón). La parada que más usuarios tuvo fue la de Villarrubia, con 429; seguida de la de Alcolea, con 219; y El Higuerón, con 150.

Que no haya muchos usuarios durante los primeros días (14.058 parecen pocos en comparación con las 1.518 plazas disponibles en cada uno de los 39 trenes que circulan entre semana y en los 13 que transitan en sábado, domingo y festivos, que entre todos suman 167.000) se considera una circunstancia normal, ya que todos los servicios necesitan un tiempo de rodaje y este lo tiene entre Córdoba y Rabanales pero aún lo precisa para el resto de trayectos.

Los retos que quedan

Que arranque el cercanías es un hecho histórico, pero nace con demandas y el reto de ir dándoles respuesta, entre ellas, llegar a Villa del Río y Palma del Río, que será la próxima meta que se marcan los políticos. Además, los primeros usuarios exigían tarifas más bajas, más frecuencias, horarios más adecuados y las dos estaciones prometidas en el Parque Joyero y Fátima. La alcaldesa se comprometió a continuar trabajando para que el tren sea un cercanías y no un media distancia, lo que permitirá abaratarlo, y a firmar un convenio con Renfe para bajar los precios mientras tanto, sin olvidar reclamar las estaciones.

El mercancías de MSC

Aunque no es un servicio tan esperado como el de viajeros, sí es importante porque llena de más actividad la terminal ferroviaria de mercancías de El Higuerón, donde opera Multirail con rutas entre Barcelona y San Roque (Cádiz), pasando por Tarragona y Córdoba (desde donde va también a Sevilla); y donde Transportes Portuarios y Maersk ofrecen el itinerario Córdoba-Algeciras. MSC empieza con un servicio semanal que más adelante aumentará a dos.

Aunque queda mucho por hacer, Córdoba se ha subido esta semana a un doble tren, el de viajeros y el de mercancías. Ahora queda luchar para que los viajes emprendidos sean muy largos y para que los trayectos tengan un principio y un fin que vayan mucho más allá de los actuales.