La Dirección General de Tráfico (DGT) lleva a cabo desde ayer y hasta el próximo domingo 21 una campaña especial de intensificación de la vigilancia, control y concienciación sobre los riesgos que existen en la circulación por carreteras convencionales. A lo largo de esta semana se controlarán en Córdoba unos 10.500 vehículos, según informaron ayer el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado, y el jefe provincial de Tráfico, José Antonio Ríos Rosas, quien señaló que el año pasado se produjeron en las vías secundarias de Córdoba 362 accidentes con víctimas, en los que fallecieron diez personas. Las salidas de vía y las colisiones frontales son los accidentes más comunes en este tipo de carreteras, añadió.

Durante los siete días de campaña, los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil comprobarán que se cumplen los límites de velocidad establecidos, que los adelantamientos se realizan de forma correcta, que se conduce sin haber consumido alcohol y drogas, que se hace uso del casco y de los sistemas de retención o que la documentación tanto del conductor como del vehículo es correcta. Según explicó Ríos Rosas, esta campaña se enmarca dentro de las diferentes medidas que pone en marcha la DGT «para disminuir la siniestralidad vial que sufrimos en las secundarias», como son la «mejora del diseño» de las carreteras convencionales y las que pretenden «modificar la conducta» de los usuarios. El objetivo, además, es reducir el número de denunciados con respecto a campañas anteriores, que se sitúa en torno al 5% de los conductores controlados.

El jefe provincial de Tráfico apuntó que las carreteras secundarias constituyen el 95% de la red de la provincia, aunque son las autovías las que soportan mayor tráfico. Sin embargo, el 80% de los accidentes con víctimas suceden en las convencionales. El motivo, según Ríos Rosas, es que «la forma de conducir en ellas es diferente», existiendo más riesgo en los adelantamientos y cruces a nivel. Además, también por ellos «circulan los usuarios más vulnerables, como peatones y ciclistas», por lo que pidió «incrementar la atención y la prudencia».

Primo Jurado destacó la «importancia» de este tipo de campañas para «concienciar a los conductores en un uso correcto de las carreteras secundarias», un tipo de vías que representan un «porcentaje altísimo» de las que hay en España. En concreto, de los más de 165.000 kilómetros de vías interurbanas computados por el Ministerio de Fomento, más de 149.500 corresponden a convencionales.