Ya solo queda un día para que el consejo rector de Urbanismo apruebe de forma definitiva la modificación de PGOU que permitirá que los terrenos del parque científico y tecnológico Rabanales 21 acojan un centro comercial. Después, solo quedará que el Pleno dé el visto bueno, lo que podría ocurrir en una sesión extraordinaria este mismo mes, o, como muy tarde, en la ordinaria de diciembre.

La culminación de esos trámites supondrá un balón de oxígeno para Rabanales 21, que podrá recibir 1,4 millones de euros por la parcela que serán fundamentales en el camino iniciado para poner en práctica su plan de viabilidad.

El paso es posible después de haber cumplido las observaciones que puso la Junta, que pidió un texto refundido con una evaluación ambiental que concluye que el centro «no tiene efectos significativos sobre el medio ambiente» y con un informe sobre el impacto en la salud que ha recibido el visto bueno de la Dirección General de Salud Pública.

El informe del Servicio de Planeamiento pide que antes de que se implante el centro comercial «se asegure la adecuada inserción en el modelo de ciudad compacta, evitando ubicaciones aisladas».

Por otro lado, el consejo pondrá fin mañana a una innovación iniciada con el PP en el 2013 para la construcción de una central de recogida neumática de basura en la Ciudad Jardín de Poniente (03). De esa forma, Urbanismo podrá seguir con los trámites para ejecutar la central en Turruñuelos. Pedro García aseguró ayer que en el consejo se darán explicaciones técnicas sobre este sistema, que se estrenará en el 2019.