La cardióloga del hospital Reina Sofía María Dolores Mesa Rubio se ha convertido en la primera mujer que accede a la presidencia de la Sociedad Andaluza de Cardiología (SAC) en 53 años de historia de esta institución. Dolores Mesa nació en Jaén, estudió Medicina en Cádiz y en 1988 eligió el Reina Sofía para realizar la especialidad de cardiología. Desde 1993 trabaja como facultativa especialista adjunta en el complejo cordobés. En la actualidad, ejerce en el área de pruebas funcionales e imagen cardiaca del servicio de cardiología del Reina Sofía y también fue hace años editora de la revista científica de la sociedad andaluza de cardiología. En mayo del pasado año, coincidiendo con el congreso anual de la sociedad andaluza, se celebraron las elecciones para la próxima candidatura de la junta directiva, en la cual esta cardióloga concurría como presidenta electa y dentro de algo más de dos años será la presidenta efectiva.

-¿Qué objetivos principales se plantea como nueva presidenta de esta sociedad?

-El principal es, sin duda, que la Sociedad Andaluza de Cardiología tenga un papel de peso y realmente eficaz en la mejora de la salud cardiovascular de la población andaluza. Eso tendremos que hacerlo con diversas actuaciones, unas puramente científicas y otras de tipo divulgativo y educacional, dirigidas a la población, asociaciones de pacientes, entre otros grupos.

-¿Forman parte de la directiva especialistas cordobeses?

-En la directiva actual me acompañan dos cardiólogos del hospital Reina Sofía, el doctor Amador López Granados, como vicepresidente de la SAC, y el doctor José López Aguilera, como vocal de la sociedad por Córdoba, lo cual creo que es una muy buena representación, que refleja el interés de los cardiólogos cordobeses por la sociedad andaluza y por la cardiología.

-En la directiva de la SAC, de 4 cargos principales, hay 3 mujeres. ¿Es reflejo de la feminización que existe en las facultades de medicina y en los hospitales?

-Bueno, eso espero, ya que la feminización de la profesión de medicina es una realidad y es lógico que la representación en distintos puestos se ajuste a esos porcentajes mayoritarios para las mujeres.

-¿Existen suficientes especialistas en cardiología en los hospitales andaluces? Por ejemplo, en el Reina Sofía se cuenta con 18 profesionales, pero en otros centros como el hospital Virgen del Rocío de Sevilla, con similar actividad a la del hospital cordobés, hay bastantes más cardiólogos. ¿Hay alguna ratio mínima de cardiólogos por población que su sociedad estime que deba cumplirse?

-En la actualidad, desde las distintas sociedades científicas se recomiendan las ratios apropiadas de cardiólogos por población atendida que permitan una asistencia de calidad y además se publican anualmente estudios que ponen de manifiesto las desigualdades en recursos humanos y de equipamiento entre comunidades autónomas y entre hospitales. En este sentido, es una realidad que el servicio de cardiología del hospital Reina Sofía es uno de los que tienen menos cardiólogos, con diferencias llamativas en ocasiones con otros hospitales de la misma comunidad. Aunque la eficiencia de nuestro servicio sea muy alta, probablemente ya no tengamos la capacidad de aumentarla salvo con más recursos humanos que en la actualidad son deficitarios.

-¿Es muy alta la carga asistencial que soporta la unidad de cardiología del Reina Sofía, teniendo en cuenta que por la mayor esperanza de vida más personas sufren patologías cardiacas y cada vez se sobrevive más tiempo a estas enfermedades?

-Efectivamente, es un tema que nos preocupa ya que, si tenemos en cuenta que la carga asistencial ya es en la actualidad muy importante, la misma irá en aumento en los próximos años debido al envejecimiento de la población y al aumento de la expectativa de vida, por lo que, irremediablemente, tendremos que crecer en recursos técnicos y humanos para ofrecer una asistencia de calidad para todos.

-¿Qué faceta desempeña en el hospital Reina Sofía?

-En estos momentos dirijo la unidad de técnicas diagnósticas no invasivas del servicio de cardiología. Esta unidad se dedica, sobre todo, al estudio de la imagen cardiaca, lo que permite un diagnóstico muy preciso de prácticamente todas las cardiopatías, así como el seguimiento de las mismas y la valoración de la eficacia de los tratamientos que se realizan. Quiero destacar la alta especialización de nuestro servicio en técnicas de tratamiento de forma percutánea mediante cateterismo de muchas cardiopatías, requiriendo para ello de la imagen cardiaca no invasiva en la sala de cateterismo. Podría considerarse que somos casi un servicio central, ya que interactuamos con todas las secciones de la unidad de cardiología, pero, además, atendemos peticiones de prácticamente todas las áreas del hospital como medicina interna, neurología, cuidados intensivos, quirófano, entre otras.

-¿La Sociedad Andaluza de Cardiología va a seguir apostando por la investigación en la especialidad de cardiología?

-Sin duda, una de las principales misiones de la SAC es fomentar y promocionar la investigación en cardiología en nuestra comunidad y ello lo hace a través de diversas actividades como es el congreso anual de la sociedad, donde se presentan casi 200 trabajos originales de investigación, y se otorgan becas a proyectos de investigación y también becas para estancias en otros hospitales nacionales o extranjeros, donde el cardiólogo pueda adquirir una alta cualificación en alguna técnica concreta e inicie una línea de investigación novedosa.

-¿Entre esas investigaciones que se puedan fomentar desde la SAC están las relacionadas con la terapia celular para regenerar tejidos afectados por enfermedades del corazón?

-La Sociedad Andaluza de Cardiología fomenta cualquier línea de investigación que suponga una mejora en la cantidad y la calidad de la salud cardiovascular, siendo la cardiopatía isquémica y la insuficiencia cardiaca, por su elevada prevalencia y su gran impacto socioeconómico, las líneas de investigación quizás prioritarias. En este sentido, la terapia celular para la regeneración de tejidos cardíacos dañados es una de las más atractivas pero no la única.

-¿Desde la sociedad que preside se fomentan a su vez actividades junto a otras entidades para prevenir entre la población (sobre todo entre las personas más jóvenes) las causas que puedan provocar un incremento de las enfermedades cardiovasculares?

-Sí, como he mencionado antes, una de las misiones fundamentales de la SAC es promocionar la salud y para ello no hay mejor población diana que los niños y jóvenes mediante medidas educativas y campañas atractivas en los colegios, institutos y universidades que van desde cómo alimentarse de forma sana, las ventajas del ejercicio o enseñarles, por ejemplo, a actuar ante una parada cardiaca en la calle.

-¿Desde su actual posición cree que se puede incentivar que en España se lleve a cabo un mayor uso de corazones artificiales definitivos para evitar que ningún paciente que esté en lista de espera fallezca por no recibir a tiempo una donación compatible?

-Sin duda, una de las misiones de las sociedades científicas es concienciar a las administraciones públicas de las necesidades médicas de la población, siempre bajo un criterio puramente científico y no económico. En la actualidad, el implante percutáneo de dispositivos sobre válvulas cardíacas o el aumento en los implantes de corazones artificiales solucionaría el problema de muchos pacientes que hoy en día no pueden operarse de forma convencional o están mucho tiempo en lista de espera para recibir un trasplante cardíaco.