Los primeros recibos han puesto los pelos de punta no solo a los afectados directamente de La Gorgoja. También, conforme se corre la voz, la inquietud se ha ido extendiendo al resto de vecinos de esta urbanización y de otras de El Higuerón después de que el viernes comenzaran a llegar los primeros recibos para el pago del IBI, notablemente incrementado, junto a otros cuatro también aumentados a efectos retroactivos y sin apenas tiempo para su pago, explica Emilio Góngora, vicepresidente de la Federación de Asociaciones Vecinales Al-Zahara y responsable del área de periferia de esta entidad.

En concreto, los recibos responden a la actualización catastral que se está realizando en áreas de Villarrubia (desde hace dos años ) y El Higuerón. Sin embargo, el proceso no está culminando a gusto de todos y, en ocasiones, hay parcelaciones en vías de regulación (como es el caso de La Gorgoja) que pasa de suelo rústico a suelo urbano, a pesar de que este proceso de regulación no ha terminado ni la Gerencia de Urbanismo ha declarado formalmente como urbano el terreno.

Además, el número de recibos que llegan a los propietarios con efecto retroactivo es el máximo que permite la ley: es decir, el de la presente anualidad y las cuatro anteriores y, para colmo, todas ellas considerando ya el suelo como urbano, sin tener en cuenta que en estos años pasados el proceso de regulación, que como se ha dicho aún no ha concluido, estaba aún mucho más retrasado y por lo tanto el carácter de suelo urbano mucho menos claro, explica Emilio Góngora.

Todo ello implica que el propietario de una parcela de tamaño medio sin construir puede llegar a estar obligado a pagar en torno a los 700 euros, y encima en un plazo corto improrrogable de apenas medio mes, ya que hay recibos llegados el día 24 que tienen como fecha tope para hacer el ingreso el 5 de septiembre. La cantidad que podría adeudar un propietario de una parcela media pero construida (pongamos alrededor de 150 metros cuadrados) entre los cinco años de IBI urbano podría superar los 2.000 euros, sin contar casos en los que la cifra sería mucho mayor.

La asociación de vecinos de La Gorgoja ha anunciado que los próximos días estará atenta a la llegada de recibos del IBI, particularmente los de aquellas parcelas edificadas, que es el caso de la mayoría, en donde el incremento será más notable.

Emilio Góngora, por su parte, no ha esperado y ya ha criticado lo que considera como una muestra de "afán recaudatorio desmedido" por parte del Ayuntamiento y una muestra de "insensibilidad" e incluso "mala fe" hacia los ciudadanos en un momento tan duro de la crisis.

"Parece que lo que se trata es de machacar al ciudadano sin que importe nada", afirma Góngora rechazando los argumentos que le han dado desde el Ayuntamiento de que "solo se está aplicando lo que dice el catastro", cuando en realidad el Ayuntamiento, dice Góngora, puede interpretar este documento y ser flexible en sus consideraciones, el número de años a aplicar la subida y en la forma de pago.