Representantes de la sociedad cordobesa, desde el obispo a la universidad, la Real Academia y agentes sociales como sindicatos y empresarios han hecho llegar sus muestras de afecto y reconocimiento hacia Julio Anguita, exalcalde de Córdoba y excoordinador general de Izquierda Unida.
El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha expresado sus condolencias a traves de Twitter, manifestando "mi condolencia a la Ciudad de Córdoba que pierde al que fue su alcalde, Julio Anguita. Jesucristo el buen Pastor, que dio la vida por él, salga a su encuentro y lo lleve sobre sus hombros con ternura".
Muere Julio Anguita | reacciones y últimas noticias
El rector de la UCO, José Carlos Gómez Villamandos, decía por Twitter: “Ha fallecido Julio Anguita, gran alcalde, gran político y gran persona. Un fuerte abrazo a su familia, amigos y compañeros. DEP”. Y añadía a este periódico que fue "un ejemplo de politico comprometido, honesto y consciente de que se debe gobernar para todos buscando el bien común. Un político ejemplo de coherencia". Por su parte, desde la Universidad Loyola Andalucía, se rector, Gabriel Pérez Alcalá, ha declarado a este periódico que “tuve muchas tertulias y foros con él sobre la Constitución española, exponíamos de forma civilizada nuestros argumentos con mucho respeto. Julio fue un político necesario en la Transición y postransición española porque el que fuera el primer alcalde comunista de una ciudad grande y emblemática como Córdoba hizo que el PCE ocupara instituciones relevantes. Después, fue un político necesario en España, que ha prestado un gran servicio al conjunto de los españoles y a la democracia. Tenía un discurso de izquierdas muy cimentado, basado en lecturas profundas. Un hombre coherente en su vida personal, profesional y política. Me unía a él una relación de discrepancia política pero mucha cercanía personal”.
También el presidente de la Real Academia, José Cosano, ha querido reconocer al político cordobés fallecido, declarando a este periódico que “fue un excelente compañero del cuerpo de Magisterio, donde empezamos juntos. Julio fue un hombre honesto, consecuente, buen compañero, que siempre tuvo un pensamiento en coherencia y esto le llevó a un comportamiento y a generar conocimiento. Nunca engañó a nadie, siempre fue por derecho. Es un paradigma de parlamentario, por si alguien quiere aprender de él en estos tiempos. Fuimos amigos y coincidimos en muchas cosas, como en el aprendizaje de vida. Deseo que descanse en paz”.
En cuanto a los agentes sociales, tanto UGT como CCOO han manifestado sus condolencias ante la muerte de Anguita. Para Vicente Palomares, secretario general de UGT-Córdoba, la ciudad "ha perdido un ciudadano, que se identificaba como referencia ineludible cuando se hablaba de esta ciudad en el plano político. Podría gustar o no gustar, pero era innegable su contundencia, su persistencia, su mantenimiento de lo comprometido, ante todo y sobre todo, defensor a ultranza, sin ataduras y sin medias tintas de sus ideas. Era de esa clase política que generaba interés y no desafección por la política, algo ya en extinción, si no extinto. Adiós para siempre al Califa Rojo de Córdoba". Por su parte, Marina Borrego, secretaria general de CCOO de Córdoba, ha manifestado sus condolencias a los familiares y amigos de Anguita, "un político cordobés y primer alcalde de la democracia en Córdoba, ejemplo de coherencia, compromiso y convicción política. Como dirigente del partido comunista de España y de IU, Anguita tuvo una constante relación con el sindicato compartiendo la defensa de los derechos y libertades de la clase trabajadora". Por ello, "lamentamos su fallecimiento en un momento en el que la ciudadanía cordobesa no podrá expresar su admiración y reconocimiento y no podrá realmente darle la despedida que merece. Julio, que la tierra te sea leve".
Por su parte, Antonio Díaz, presidente de la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO), ha mostrado su pesar, también desde la Cámara de Comercio de Córdoba, por el fallecimiento de Anguita, y traslada a la familia y amigos su pésame. "Desde 1979, cuando asumió la Alcaldía de Córdoba, siempre desde el primer momento fue un líder carismático, trasladando a la vida política de la ciudad su ideología y su forma de hacer política. Más adelante, al asumir la secretaría general del PCE y la coordinación general de IU, consolidó un liderazgo político en los partidos de izquierda que difícilmente ha podido ser superado con posterioridad. Siempre fue una persona honesta con su pensamiento, fue carismático y siempre llevó a la práctica sus ideas y creencias".
