El Sindicato Andaluz de Bomberos (SAB), que acaba de lograr representación en la junta de personal del Ayuntamiento de Córdoba, reclamó ayer vehículos del SEIS apropiados para el casco histórico, ya que en la actualidad para esta zona de la ciudad, con vías muy estrechas, solo se cuenta con una Vanette con 35 años de antigüedad. El secretario general del SAB, Gabriel Merchán, acompañó ayer a la directora general de Recursos Humanos, Antonia Luisa Sola, en un paseo por las instalaciones del SEIS, a lo largo del cual le trasladó algunas de las reivindicaciones históricas de los bomberos, como la necesidad de una flota específica para el casco, con la que cuentan ciudades como Granada, para acceder al Albaicín.

También reclaman la modernización de las instalaciones del parque central de bomberos, que ha quedado obsoleto después de años en los que apenas se ha actuado en él. «Es un edificio totalmente abandonado, a años luz de otros servicios municipales», dice Merchán, para quien las instalaciones (cocina, centralita o vestuario) no presentan condiciones dignas para desarrollar el trabajo. «Nuestras jornadas son de 24 horas y esto no está adecuado», añade.

El SAB también denunció a la directora general la necesidad de renovar el vestuario de los bomberos, que no se repone desde hace 4 años, y por supuesto, le reiteró la necesidad de ampliar la plantilla. Sobre este apartado, Merchán lamenta la parálisis de las oposiciones para 21 plazas de bomberos (la prueba está en la fase de la prueba médica, donde han caído 28 aspirantes), y «que no se hayan tramitado las plazas para las comisiones de servicio».

El SAB, que al igual que los otros dos nuevos sindicatos del Ayuntamiento aún no dispone de una ubicación para atender a sus afiliados en la quinta planta de Capitulares, espera que la directora general de Recursos Humanos tenga en consideración sus reclamaciones y lleve a cabo un estudio global de sus necesidades.