Ser mujer discapacitada duplica el riesgo de sufrir violencia de género. Según los datos de la Encuesta de Discapacidad, Autonomía Personal y Situaciones de Dependencia del INE presentados ayer en el marco de unas jornadas formativas de Inserta Innovación en la Fundación ONCE, una de cada tres mujeres con discapacidad relatan haber sido víctimas de violencia machista, ya sea psíquica, física o sexual, más del doble que en el resto de la población, con un 15,1% de incidencia. Se produce, según los expertos una doble victimización, son agredidas por el hecho de ser mujer y por sufrir una discapacidad.

Técnicos de la Fundación CERMI Mujeres, del Servicio de Atención a la Mujer, de Inserta Empleo y de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Córdoba expusieron en una mesa redonda las claves que explican la situación de estas mujeres, en las que influyen factores como la menor visibilidad social, también en los medios de comunicación, que se ha visto acrecentada con la crisis. Según indicaron, fruto de esa invisibilización, se puede hablar de cierta involución en el abordaje de los casos. Asimismo, señalaron que la presencia de barreras (comunicación, movilidad, falta de información) o la culpabilización que estas mujeres sienten ante sus agresores, que además ejercen como cuidadores, son cuestiones determinantes a tener en cuenta en el análisis de esta realidad. Según la psicóloga Mabel Pérez, las víctimas acostumbran además a autoculparse por las agresiones, llegan a justificar la violencia de sus parejas y protegen al agresor basándose en ideas falsas en torno al amor romántico. Influye además el proceso de habituación según el cual «la mujer con discapacidad cree que haga lo que haga no puede evitar la violencia».

La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio; el director territorial de Inserta Innovación, Francisco López Aguado, y la directora de ONCE en Córdoba, Carmen Aguilera, fueron los encargados de inaugurar la jornada, en la que Ambrosio recalcó la dificultad de estas mujeres no solo para denunciar sino para tomar conciencia de que son víctimas de violencia. Por su parte, Carmen Aguilera hizo un llamamiento a la sociedad para decir «basta a los machismos, a los chistes graciosos, a los falsos estigmas», al tiempo que invitó a la sociedad a posicionarse contra esta forma de «terrorismo que constituye la manifestación máxima de desigualdad entre hombres y mujeres».