Los padres del colegio Fernán Pérez de Oliva se han cansado de esperar una solución definitiva al problema de los porteros y ayer se concentraron en la puerta del centro a primera hora de la mañana para exigir una persona a tiempo completo y no alguien que venga por la mañana dos horas, abra, y vuelva al mediodía a la hora de salir. Y es que, entre apertura y apertura, los centros que no tienen portero aseguran vivir una odisea diaria. En el Fernán Pérez de Oliva, cuya portera es liberada sindical, tienen «38 niños con necesidades especiales y nos preocupa que haya un incidente porque hay mucho movimiento de padres, de proveedores, a veces la puerta se queda abierta y son los profesores y administrativos quienes, por su buena disposición, están asumiendo esa tarea», explica el director. El problema se repite en otras zonas. El colegio Miralbaida, con tres puertas, tampoco tiene portero por baja maternal. Antes tenían dos y ahora solo uno durante un par de horas, pese a contar con alumnado de Educación Especial y de centros de reforma. «Los maestros tenemos que hacer de porteros o dejar a los padres que vienen para llevarse al niño al médico o porque se ha olvidado algo... esperando en la puerta», comenta el jefe de estudios, «el AMPA ya ha escrito a Educación y al Ayuntamiento». El colegio Federico García Lorca, ubicado en el barrio del Guadalquivir, está en situación similar. «El portero titular estaba de baja por enfermedad hasta que se jubiló y no se cubrió la plaza», explica la directora, que afirma haber tenido problemas como que se haya escapado algún niño o incluso que un padre haya saltado la valla. «No sé en otras zonas, pero aquí no puedes dejar a los niños solos ni un momento porque se lía», comenta, «pero hay comedor, aula matinal, vienen proveedores, llaman padres... estamos siempre a salto de mata», explica. Son solo algunos de los centros afectados por los recortes que, según el concejal David Luque, «se deben a una ley del Gobierno de racionalización del gasto que nos impide recurrir a la bolsa de empleo, la única vía ha sido declarar el servicio prioritario». A.R.A.