Actividades infantiles, música, talleres o degustaciones fueron algunas de las propuestas disfrutadas ayer en la segunda jornada de la Velá de la Fuensanta, que afianza las tradiciones recibiendo un año más una respuesta positiva por parte de los cordobeses. De este modo, los asistentes formaron largas colas para participar en algunos de los actos realizados en la plaza del Pocito y entre estos se encontró la popular Sardiná, que fue preparada por la asociación de vecinos San José Obrero.

En total, se dispusieron 160 kilogramos de este pescado, según detalló José Ortega, que es vocal de este colectivo y recordó que el año pasado atendieron a un millar de personas. Ocho socios preparaban y repartían la comida a los asistentes, y las primeras en degustarla fueron María Dolores Moyano y Antonia Serrano, que llegadas desde el barrio de Santa Marina esperaron una hora para poder ocupar este puesto.

En la parte superior de la plaza, decenas de familias y niños se concentraron en torno a una caseta para participar en el taller Pinta tu campanita de mil colores, organizado por la delegación municipal de Educación e Infancia. Cristina Quintana, una monitora, explicó que el objetivo era que los más pequeños «aprendan la tradición y desarrollen su creatividad». Vanessa Mondéjar y José María Reyes fueron dos de los familiares que acompañaron a niños participantes y expresaron su queja por la organización. En opinión de la primera, «tienen poco espacio y no hay lugar para sentarse», aunque también subrayó que «el taller es muy bonito y a ellos les divierte». De su parte, José María Reyes señaló que «hay más familias en la cola que participando», puntualizando que «se puede aprovechar el espacio y la actividad se llenaría, porque a los niños les gusta».

La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, visitó este taller y, en referencia a la fiesta, destacó el objetivo de «seguir manteniendo una cita tan importante para la ciudad». En este sentido, preguntada por la respuesta de los cordobeses, comentó que «no hay nada más que ver que, a pesar de esta temperatura calurosa, la plaza está hasta arriba», y añadió que «septiembre se espera con ganas porque lo empezamos con esta Velá y es una de las fiestas en las que la participación se subraya aún más».

De otro lado, entre quienes venden campanitas y otros recuerdos, en la plaza se encontraba José Manuel Rodríguez, que apuntó que «ayer (por el jueves) hubo bastante menos gente que otros años» y, a su juicio, «se está perdiendo mucho la tradición», por lo que cree que «tendrían que haberle dado más difusión» a esta fiesta.

Además de las citas referidas, el programa incluyó otras como la misa ofrecida por el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, con motivo de la festividad de Nuestra Señora de la Fuensanta. Asimismo, Mercacórdoba repartió casi 200 kilos de fruta para fomentar su consumo entre la población y, sumándose a las vertientes religiosa, lúdica o gastronómica, en el ámbito deportivo comenzó la novena Ruta del Caimán, que es organizada por el Instituto Municipal de Deportes y el Club Piragüismo Córdoba (también se desarrolla hoy y mañana), y este año tiene el atractivo de encontrar en el río el caimán realizado por el artista Manuel Cruz.