La restauración del molino de la Albolafia y la puesta en marcha de su noria por la delegación del Casco Histórico del Ayuntamiento evidencia la necesidad de actuar de nuevo en los Sotos, monumento natural. La rehabilitación del molino ha sido bien recibida por vecinos y ecologistas, que ven con buenos ojos la iniciativa pero exigen más actuaciones, sobre todo en la vegetación, ya sea la de los Sotos o la del resto del cauce, que invade de nuevo las dos orillas. De momento, el Ayuntamiento es el único que ha adelantado que tiene un plan para el río, que ultima. El delegado de Infraestructuras y Medio Ambiente y presidente de Sadeco, David Dorado, explica que el plan «está muy avanzado y a falta de partida presupuestaria» y que irá más allá de la retirada de basura. Dorado indica que incluye habilitar una vía de acceso a la maquinaria y afectará a ambas márgenes del río.

A la presidenta del consejo de distrito Centro, Juana Pérez, le «parece bien» la restauración del molino de la Albolafia, ya que «en varios consejos se ha planteado y en distintos mandatos se ha intentado arreglar» sin lograrse. Pérez Girón pedirá una reunión para conocer el proyecto, ya que «no nos han explicado nada».

La asociación de vecinos La Medina aplaude la iniciativa, ya que «interesa todo lo que se haga para mejorar el río», que necesita más intervenciones. Eso piensa Vicente Castilla, miembro de esta asociación que en noviembre intervino en el Pleno para exigir la limpieza de 1.200 metros de río y del entorno de la noria. A su juicio, «hay que dar valor a la noria» y aprovechar la habitación que tiene el molino, que la asociación quiere que se convierta en aula educativa, «de forma que no solo sirva para el turismo». En cuanto a la vegetación de los Sotos, piensa que «no hay más remedio» que intervenir para que el molino de la Albolafia luzca tras la restauración. En este sentido, opina que «hay que abarcar un poco más» de lo ejecutado por la Junta en la restauración que hizo de los Sotos.

Una imagen de los Sotos y la noria de la Albolafia, escondidos por una tupida vegetación. Foto: SÁNCHEZ MORENO

El portavoz de la plataforma Por un Río Vivo (integrada por Ecologistas en Acción y otros colectivos), Diego Peinazo, cree necesario conservar los molinos y no esperar a que se deterioren tanto, por lo que exige su cuidado. Esta plataforma elaboró una propuesta de gestión de la vegetación del tramo urbano del Guadalquivir, «que conlleva clareos de arboleda», y que presentó a Junta, Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) y Ayuntamiento. «Ni Junta ni Ayuntamiento han contestado» y la CHG «dice que las labores de mantenimiento del río son competencia municipal y ahí está el atasco». En cuanto a los Sotos, afirma que es necesario «despejar la vegetación alrededor de los molinos para que no se deterioren y se vean desde el Puente Romano». Su propuesta consiste en «dejar la vegetación de la isla como arboleda, quitar las especies alóctonas como los eucaliptos, y convertir la orilla derecha en una pradera húmeda». «Conservar el espacio no significa que no se toque», indica, pero, eso sí, «con más cuidado» que en la actuación que hizo la Junta hace unos años.

La Junta no ha aclarado si tiene algún plan para los Sotos. La CHG, de momento, no tiene en mente limpiar el río como hizo en el 2013 y en el 2016. Fuentes de la CHG aseguran que la actuación en el cauce urbano compete al Ayuntamiento, aunque, eso sí, «en función de la disponibilidad presupuestaria» o «la emergencia» puede «actuar de manera discrecional».