La reforma del Archivo Histórico Municipal sale a concurso tras casi un año de espera. El proyecto de rehabilitación del edificio fue aprobado ayer por la junta de gobierno local, que dio el visto bueno al estudio de seguridad y salud y al expediente de contratación, por lo que, una vez pasado este trámite, ya solo queda la publicación en la plataforma de contratación y en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) para que empiece a contar el plazo para la presentación de ofertas. El proyecto sale a concurso por 2,6 millones y, según explicó la delegada de Hacienda, Alba Doblas, se podrán rebasar las limitaciones presupuestarias de la anualidad para alcanzar la mayor ejecución posible. En principio, el expediente prevé 294.542 euros para el 2017; 1,7 millones para el 2018; y 589.085 euros para el 2019.

La reforma del Archivo estaba contemplada en los presupuestos del 2017 pero su licitación se ha demorado. Como adelantó este periódico en febrero, el proyecto recuperará los valores patrimoniales de la antigua Casa de los Guzmanes, de la que se respetarán sus valores arquitectónicos, patrimoniales y artísticos.

Como base para este proyecto, se ha utilizado un plan de usos del 2010. La propuesta consiste en abrir un segundo acceso desde Sánchez de Feria como puerta de servicio para carga y descarga de documentación, que permitirá entrar de forma directa al archivo y a la zona de administración. Además, se habilitará una sala de recepción y preclasificación de material y se recuperará todo el espacio en el que está uno de los tres ajimeces, del que se retirará una estructura metálica y se adecuará como sala de exposiciones. La estancia ubicada a la derecha del zaguán se habilitará como zona de atención al público, que tendrá un punto de venta. A esto se sumará que el despacho de dirección se convertirá en sala de conferencias con 42 butacas. El proyecto prevé también reordenar la zona de administración. Otra de las actuaciones, y según consta en el proyecto, consistirá en recuperar la galería de la planta primera «con una partición semiacristalada» que la separará del taller de restauración. La sala de investigación se adaptará para su uso como despacho de dirección con zona de trabajo y reuniones.