La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, recogió ayer en Madrid el galardón de finalista del premio a las Buenas prácticas locales de la Red de Biodiversidad de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), por el programa de diversificación del paisaje de la campiña de Córdoba.

El galardón le fue entregado por el presidente de la Red y alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros, en el transcurso de la 7ª Asamblea general de la Red de Gobiernos Locales, a la que la alcaldesa ha asistido en su calidad de vicepresidenta de la Red.

El proyecto galardonado, actualmente en ejecución, tiene como objetivo sensibilizar a los agricultores de la Campiña de Córdoba, para que participen en la recuperación y conservación de los elementos paisajísticos de sus fincas, principalmente en la recuperación de enclaves forestales que pueden desarrollarse en zonas improductivas de las parcelas de su propiedad.

Para entender las dimensiones de este programa hay que partir de la base de que el término municipal de Córdoba es el más extenso de Andalucía, con 1.250.000 hectáreas, de las cuales, el 66% (más de 82.000), se corresponden con un paisaje de campiña, con grandes fincas de un carácter eminentemente agrario y donde los espacios no cultivados son prácticamente inexistentes.

El programa se puso en marcha con el objetivo de investigar el estado actual del paisaje rural, dar respuesta a la problemática ambiental de la pérdida de biodiversidad, así como promover la diversificación del paisaje rural de la campiña entre todos los agentes que operan en el término municipal (asociaciones agrarias, propietarios, administración, comunidad científica, empresas agroambientales y entidades financieras), para introducir nuevos valores entre los contemporáneos de nuestra sociedad.