Los rectores de Córdoba y Burgos, José Carlos Gómez Villamandos y Manuel Pérez Mateos, respectivamente, hicieron un llamamiento ayer a potenciar la divulgación científica como eje estratégico de las universidades y a poner en valor «la labor callada y silenciosa» de los investigadores, cuyo trabajo es esencial en el desarrollo territorial. Ambos rectores se se dieron el relevo en la organización del Congreso de Comunicación Social de la Ciencia, cuya sexta edición se celebró Córdoba en noviembre, con «gran éxito», y la séptima será en Burgos, en el otoño del 2019, centrada en la evolución en la comunicación del conocimiento.
En el acto de ayer, en el que también intervinieron el presidente de la Asociación Española de Comunicación Científica, Antonio Calvo Roy, y la coordinadora de la Unidad de Cultura Científica e Innovación de la Universidad de Córdoba, Elena Lázaro Real, se presentaron los dos tomos que recogen las 175 comunicaciones presentadas en el congreso de Córdoba, que fue «un banco de ideas de cómo acercar a la sociedad el conocimiento», como expresó Elena Lázaro.
El rector de Burgos, Manuel Pérez, subrayó que la «comunicación no es una opción, es una obligación, es hacer en lenguaje inteligible la ciencia» y lamentó que la ciencia y las universidades hayan sido las peor paradas durante la crisis económica, con una reducción del 17%.
