-¿Qué es lo más positivo de la situación que estamos viviendo con el coronavirus?

-El espíritu de comunidad. Desde las farmacias también estamos ayudando a personas que están sufriendo violencia de género a dar la voz de alarma, así como a detectar la ausencia prolongada de los usuarios más vulnerables y asiduos que ya no acuden a por sus medicamentos. Todo eso es posible gracias a la entrega y vocación de servicio de nuestros profesionales, quienes lo están dando todo, incluso sin contar con las medidas de protección que merecen y que el Gobierno aún no nos proporciona.

-¿Qué enseñanza tenemos que extraer de lo que estamos pasando?

-Que no somos seres aislados. Creímos en un principio que era una especie de gripe concentrada en una región de China y al final se ha convertido en una crisis sanitaria global y sin precedentes en el último siglo. Esto nos debe llevar a pensar más en nuestra salud y en la prevención. Sobre esto ya venimos trabajando desde la profesión: en cómo ayudar desde las farmacias, los espacios sanitarios más cercanos y accesibles para la población, a mejorar su calidad de vida.

-¿Qué cuatro acciones concretas adoptará una vez que finalice el estado de alarma?

-Lo primero, reencontrarme con los seres queridos. Tras eso, volcarme en hacer a la farmacia cordobesa aún mejor. Y eso se consigue con formación, con nuevos servicios profesionales sanitarios complementarios a nuestra labor y con una continua vocación de excelencia.

-¿Cómo debe contribuir la iniciativa pública y la iniciativa privada para remontar la situación?

-Hay que ir de la mano. La farmacia es el mejor reflejo de todo lo bueno que puede aportar esto. Somos establecimientos privados con vocación de servicio público. Estamos establecidos de forma equitativa en toda la provincia. En algunos núcleos de población somos incluso el único espacio que ofrece un servicio sanitario permanente. Eso hay que aprovecharlo y potenciarlo porque representa una inversión en salud, en más calidad de vida para los pacientes y mayor sostenibilidad de nuestro sistema sanitario.