El Pleno también aprobó ayer la modificación urbanística que permitirá la construcción de un centro comercial en el parque tecnológico Rabanales 21. Solo los cuatro concejales de Ganemos votaron en contra de esta innovación que, al igual que el punto de Cosmos, fue suspendida en el Pleno anterior. El portavoz de Ganemos, Rafael Blázquez, reiteró su oposición a esta modificación urbanística ya que considera que un centro comercial no va a solucionar los problemas financieros de Rabanales 21. «Reclamamos una hoja de ruta más ambiciosa, pero no podemos respaldar esta innovación que no va a ayudar a Rabanales», dijo ayer en el Pleno.
Más optimista se mostró el portavoz del PP, José María Bellido, al expresar su alegría por la aprobación de esta innovación, que calificó de «buena noticia para Córdoba», y aseguró al gobierno local que su grupo va a estar «en estas innovaciones que supongan generar empleo y más actividad económica». Además, Bellido expresó su deseo de que el futuro centro comercial contribuya a darle «mayor estabilidad» al parque tecnológico.
El presidente de Urbanismo, Pedro García, fue más contenido en su aplauso al centro comercial y subrayó que no está previsto ningún otro en Córdoba.
Por su parte, el promotor del centro comercial de Rabanales 21 mostró ayer su satisfacción por este nuevo paso, aunque no será el último, ya que aún falta que Salud se pronuncie sobre el expediente, para lo que tiene un mes, y la aprobación definitiva. El promotor espera que esos trámites estén acabados antes de final de noviembre. Su idea es que el centro y el edificio de I+D estén funcionando en el 2019. A partir de ahora, sus planes son trabajar en el proyecto, contactar con operadores y posibles inversores y reunirse con Rabanales 21 para que gestione la ocupación del edificio de I+D por las empresas interesadas. También se reunirá con Urbanismo para la obtención de la licencia.
El presidente de Rabanales 21, Manuel Pineda, considera el paso dado «una buena noticia para Rabanales 21 y para los trabajadores del parque», ya que «se abre una ventana al futuro». Pineda espera que los trámites que restan «sean más ágiles y que pronto veamos movimientos de tierra y se genere empleo».
