El día después de la decisión del comité federal, el PSOE cordobés se afanó en cerrar filas en torno a las que son ya sus listas al Congreso y el Senado por Córdoba, y a las municipales de la capital, tratando de poner «punto final», al menos públicamente, al enfrentamiento vivido en el seno de esta formación con motivo de la confección de estas candidaturas. Para Isabel Ambrosio, alcaldesa y candidata a la reelección, ayer fue un día para «poner punto y final» a un proceso interno «participativo y reglado». Para Antonio Ruiz, secretario provincial del PSOE, el momento de «acatar» las listas y empezar a trabajar en las campañas.

La alcaldesa de Córdoba volvió ayer, a preguntas de la Cadena Ser, a destacar las bondades de su equipo, del que dijo está «cohesionado», y cuenta «con mucha ilusión y ganas». Asimismo, la regidora socialista describió su lista, que se ha impuesto a la propuesta por la ejecutiva provincial, como un equipo que se parece «lo más posible a esta ciudad», por lo que ha integrado, por un lado, a políticos, personas que vienen de la participación ciudadana y perfiles «con una importante experiencia de gestión».

Ambrosio, sin embargo, evitó calificar su postura, después del refrendo recibido a sus posiciones por parte de Ferraz, como algo parecido a una victoria: «No me siento más fuerte, sino comprometida con el proyecto que encabezo», afirmó la alcaldesa, que reconoció tener ahora «más conocimiento y herramientas, y mayor nivel de responsabilidad» que cuando concurrió a las elecciones municipales en 2015.

El secretario provincial del PSOE cordobés, Antonio Ruiz, por su parte, dijo que acatará la decisión del comité de listas federal, y se mostró «absolutamente respetuoso» con las normas y procedimientos acordados en el seno de la formación liderada por Pedro Sánchez para la confección de dichas listas. «Desde este momento son las listas del PSOE de Córdoba» y «las mejores». Para Ruiz, ahora, su «único objetivo es que este país siga avanzando económica y socialmente» para lo que se pondrán manos a la obra en las próximas campañas electorales del 28 de abril y el 26 de mayo próximos.

A preguntas de la prensa, el secretario general del PSOE de Córdoba negó sentirse «desautorizado» por Ferraz, pese a haber dejado fuera de las candidaturas a la gran mayoría de los nombres propuestos por la dirección provincial. «En absoluto me siento desautorizado», afirmó ayer. «Como dirección provincial no podríamos haber hecho otra cosa que la que nos decían nuestras normas, que era escuchar a la militancia, hacer las propuestas en función de lo que había votado esa militancia y acatar lo que el comité federal decida». Por último, defendió las palabras de Susana Díaz de que «toma nota» de la decisión del PSOE madrileño, al interpretar que lo quiso decir simplemente es que la voz de la militancia debería haber tenido más peso en la decisión final.