Las arcas municipales han registrado un récord histórico al cerrar el mes de enero con 119.131.234,84 euros. La cifra, facilitada ayer por el Partido Popular, es del órgano de planificación económica y presupuestaria del Ayuntamiento, que registró el mes pasado el saldo de tesorería más elevado de la democracia en Córdoba. El montante es un 59% superior a la cifra que el PP dejó en mayo de 2015 cuando perdió la Alcaldía (aquella acta de arqueo fue de 76 millones, casi el triple de lo que a su vez recibieron los populares de Ocaña), y supone un tercio del presupuesto municipal, que asciende a los 305 millones.

Para el PP, tener 119 millones de euros es un mal resultado, que evidencia «el drama de gestión que agrava la situación de Córdoba y pone de manifiesto la incompetencia de la señora Ambrosio, que no es capaz de gastar lo que tiene». El viceportavoz popular, Salvador Fuentes, criticó ayer que a pesar de tener en tesorería esa cifra millonaria el equipo de gobierno haya sido incapaz de pagar los retrasos a la plantilla de Policía Local y de Bomberos; de dejar sin gastar 11 millones de euros del capítulo de personal, pese al problema de falta de plantilla en Capitulares, o de poner en marcha planes de actuación prometidos en barrios desfavorecidos, como el plan integral del Sector Sur o Palmeras.

Y un argumento más, en el que insistió el PP, ¿cómo puede estar pasando todo esto y que el gobierno local no baje los impuestos? «Había margen suficiente para devolver a los cordobeses el esfuerzo que han hecho durante la crisis, pero el gobierno de Ambrosio no lo ha hecho», lamentó ayer el viceportavoz.

RESPUESTA DEL GOBIERNO LOCAL / El gobierno municipal respondió ayer a estas críticas sin negar la evidencia, pero relativizando la cifra récord con dos argumentos fundamentales: uno, el grueso de los 119 millones son inversiones previstas y provisión de fondos para ejecutarlas (están ahí pero se invertirán); y dos, los atrasos en los pagos a la plantilla no son un problema de liquidez, sino de Intervención, esto es, no se han pagado por los retrasos administrativos de esos expedientes.

Así, fuentes de la Delegación de Hacienda, en manos de Izquierda Unida, pidieron al PP que «deje de utilizar de forma sesgada los datos, pues saben perfectamente que gran parte de la cuantía señalada corresponde a provisiones de fondos». Es decir, dinero que se destinará a proyectos que se van a ejecutar en los próximos meses y también partidas correspondientes a proyectos para los cuales existe una obligación de crédito, como pueden ser el Palacio de Congresos, el aeropuerto, el Plan Turístico de Grandes Ciudades o las contribuciones especiales del Servicio de Extinción de Incendios. «Solo esas cuatro cuestiones suponen más de 25 millones. Son partidas que están previstas para eso y que seguirán estando ahí hasta que no se desarrollen los proyectos», comentan las mismas fuentes.

La Delegación de Personal, cuyas competencias tienen los socialistas, explica el retraso de las horas extras de Policía Local, Bomberos y otros departamentos municipales por los reparos que puso el año pasado la Intervención, lo que ha obligado a reiniciar de nuevo los expedientes en 2019. «Esto es la pescadilla que se muerde la cola, no podemos gestionar con la mitad de personal», comentan fuentes del grupo municipal del PSOE. Además, salen al frente de las críticas por haber dejado sin gastar 11 millones del capítulo de personal explicando que las plazas que se ofertan «deben provisionarse desde el primer momento, aunque luego no se convoquen, por lo que año tras año habrá un desfase de dinero en esa materia», añaden.