Partido Popular y Ciudadanos celebraron ayer su primera junta de gobierno local con la ausencia de la concejala Eva Timoteo, a quien el alcalde dejó la semana pasada sin sueldo y sin delegación tras conocerse que había estado compaginando, sin la aquiesencia del Pleno, dos actividades: la política, al frente de la Delegación de Servicios Sociales, y la profesional, al mantener abierto su despacho como procuradora.

De este modo, el equipo de gobierno inicia la semana con dos retos cruciales pendientes: por un lado, la regularización administrativa de la concejala de Ciudadanos y, por otro lado, la aprobación del presupuesto municipal para este año.

El portavoz de los populares, Miguel Ángel Torrico, expresó ayer su convencimiento de que las cuentas empezarán a tramitarse "en cuestión de días, más que de semanas". Las previsiones del gobierno local son culminar esta misma semana la aprobación de los presupuestos de los organismos autónomos y llevar las cuentas para su aprobación en la junta de gobierno local de la próxima semana. Se trata ya de trámites administrativos para echar a andar el documento, toda vez que PP y Cs cuentan desde hace unos días con el apoyo de Vox, cuya portavoz municipal, Paula Badanelli, anunció que al menos se abstendrán para que la aprobación de las cuentas sea posible.

En cuanto a la situación de Eva Timoteo, fuentes jurídicas coinciden en señalar la necesidad, previa a la aprobación de su nuevo régimen retributivo para el desarrollo de su nueva labor al frente de la Delegación de Participación (que temporalmente realiza Isabel Albás), de regularizar su situación económica, en la cuantía que fije el Pleno respecto a la devolución de lo que se entienda haya cobrado de manera irregular estos dos años de mandato. El informe del secretario del Pleno, emitido a petición del alcalde sobre la situación de Timoteo, redundaba en esta cuestión económica, al entender que de lo contrario se podría incurrir en responsabilidad contable por alcance, siendo el propio Tribunal de Cuentas el que podría exigir la devolución de emolumentos.