La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, insistió ayer en la «plena disposición» del Ayuntamiento para que el Ministerio del Interior pueda acometer la construcción de la nueva comisaría de Campo Madre de Dios, después de que se anunciara ayer que Urbanismo pedirá la devolución del suelo para cederlo a su vez al Estado y que puedan comenzar las obras. La regidora socialista afirmó que el Consistorio llevará a cabo «todos los trámites para intentar solventar» el asunto de la titularidad de los suelos e indicó que eso «no puede ser un obstáculo para que Córdoba consiga ese equipamiento». De hecho, el Ayuntamiento, dijo Ambrosio en un comunicado de prensa, «está abierto a cualquier solución que garantice la permanencia de esa inversión en los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE)».

El primer teniente de alcalde, Pedro García, indicó por su parte que «no se pongan excusas sin consistencia para no construir una nueva comisaría y no hacer la inversión» prevista por el Ministerio del Interior, porque, «si el problema es el diálogo, lo habrá hasta la saciedad, y si el problema son cuestiones urbanísticas o de propiedad, el Ayuntamiento lo va a solucionar y pondrá todo a disposición del Ministerio del Interior para que se cumplan los compromisos de la nueva comisaría».

García contestó de ese modo a las críticas del portavoz municipal del PP, José María Bellido, al hecho de haberse enterado por la prensa de que la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) va a pedir la reversión del suelo de la comisaría, para poder ponerlo a disposición del Ministerio del Interior y que éste pueda acometer el proyecto cuanto antes. Bellido dijo que espera que haya «algún expediente administrativo» respecto a esta propuesta del gobierno municipal de PSOE e IU, al entender que «no son las formas adecuadas, por parte del Ayuntamiento, el estar llevando un asunto con el Ministerio del Interior a través de los medios de comunicación, de modo que, cuando tengamos papeles y expedientes» y los pueda valorar Interior, será cuando puedan opinar los populares.