Todos los edificios que tenían que pasar la inspección antes del 28 de junio del 2018 tendrán hasta diciembre, ya que Urbanismo prorrogará los plazos existentes mientras aprueba la ordenanza. El nuevo documento fija hasta el 31 de diciembre del 2019 la fecha límite para que se sometan a un chequeo los inmuebles BIC (y los de su entorno) y los que a finales del 2018 tengan más de cien años. Más tiempo tendrán, hasta el 31 de diciembre del 2020, los bloques que el 31 de diciembre del 2019 tengan entre 75 y 100 años. Después, el 31 de diciembre del 2021 será la fecha tope para los inmuebles que tengan entre 50 y 75 años el 31 de diciembre del 2020. Por último, todos los que a partir del 31 de diciembre del 2021 cuenten con una antigüedad de 50 años dispondrán hasta el 31 de diciembre del 2022.

Aunque aún debe analizar el documento, el presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano, Juan Andrés de Gracia, piensa que recoge las demandas principales, por lo que «el punto de partida es correcto».