Ernesto Caballero dio con sus huesos en la cárcel después de seis años en busca y captura. Años antes, tuvo que vivir el asesinato de su padre (alcalde republicano de Villanueva de Córdoba y maqui), de su tío un año antes, el encarcelamiento y las palizas a su madre... Caballero, histórico comunista cordobés, relató ayer la historia de su familia ante la Eurocámara. Junto a Remedios Gómez, vecina de Santa Cruz y represaliada, y ocho cordobeses más, Caballero ha viajado a Bruselas como parte de la Plataforma de la comisión de la verdad. Allí, pidieron a la Eurocámara que obligue al Gobierno español a crear una comisión de la verdad en las Cortes para investigar y reparar los crímenes franquistas. La plataforma expuso en Bruselas el aval de las cifras: 150.000 personas desaparecidas, 2.000 fosas comunes y unos 30.000 niños robados que desconocen su origen. "Venimos a denunciar que en España se han cerrado todas las vías a las víctimas del franquismo. Venimos a pedir amparo a las instituciones europeas", dijo el portavoz, Jordi Gordon. Con la plataforma viaja Luis Naranjo, director de Memoria Histórica de la Junta, quien reclamó a la UE que "perciba los crímenes del franquismo como lo hace con los de la antigua Yugoslavia o la Alemania nazi". La Eurocámara debe votar esta petición.