La misma semana en la que el consejo rector de Urbanismo ha tumbado la modificación del Plan del Conjunto Histórico que perseguía limitar apartamentos y viviendas con fines turísticos se ha presentado en el órgano asesor del Imtur el informe del grupo de trabajo centrado en ese tipo de alojamientos, que el organismo municipal quiere que quede aprobado en otro consejo consultivo antes de las elecciones y que demanda mejoras en la normativa autonómica.
El informe del grupo de trabajo explica que la actividad de las viviendas con fines turísticos escapa al control de los ayuntamientos en Andalucía al necesitar solo una declaración responsable para la inscripción en el Registro de Turismo. Además, no es una actividad económica sujeta al control municipal a través del IAE, sino que se considera ganancia patrimonial y se tributa a través del IRPF, por lo que los ayuntamientos carecen de datos sobre el número de declaraciones y la recaudación.
El documento indica que «resulta poco acertado» que una actividad que genera 12,6 millones en Córdoba «no ayude de manera directa al mantenimiento de los servicios públicos municipales». Por ello, concluye que debe mejorarse la normativa autonómica para que los ayuntamientos puedan planificar y limitar «el crecimiento descontrolado», al menos en zonas declaradas como saturadas, y diferenciar entre alquiler de vivienda completa y por habitaciones.
El dictamen enumera las medidas que debería incluir la modificación del plan del casco rechazada esta semana, como establecer zonas saturadas, frenar los cambios de usos residenciales, definir nuevas condiciones de habitabilidad, limitar la agregación de parcelas y permitir el uso de solares.
