Ya no será a finales de año, sino a mediados del 2019. La concejala de Infraestructuras, Amparo Pernichi, que en julio del año pasado se comprometió a que la calle Loja tendrían resuelto el problema «antes de acabar el año», informó ayer de que la situación no podrá resolverse al menos hasta el segundo trimestre del año. Los vecinos de la zona llevan años quejándose de la falta de iluminación en esta calle, derivada de los continuos robos de cobre, y de los problemas de inseguridad que conllevan, algo de lo que Pernichi asegura ser consciente, por lo que su intención es «dar una solución definitiva».

Sin embargo, esa medida tendrá ahora que esperar a «incorporar los remanentes de presupuesto, algo que Hacienda suele hacer sobre el mes de marzo». La concejala no ha explicado por qué se comprometió a que se solucionaría antes de finales del 2018 y qué ha cambiado para que los plazos hayan cambiado, aunque ha insistido en que «la contratación es prioritaria» y que «se va a solucionar definitivamente el problema de origen».