La hermandad de la Paz ha incrementado su patrimonio con una pintura de Juan Martínez Cerrillo, autor de sus imágenes titulares.

Se trata de una interesante obra fechada en torno al año 1962 donde se representa a la Inmaculada Concepción, envuelta en una ráfaga y venerada por dos ángeles. La técnica empleada en este tipo de obras responde a una tabla estucada y posteriormente cubierta con pan de oro y plata. Sobre esta base, el artista dibujaba las figuras, cuya ornamentación la iba definiendo usando distintos buriles e incluso utilizando la pedrería, dando un efecto muy preciocista característico de la producción pictórica del artista.

En lo que respecta a los rostros y partes no tratadas con pan de oro, las solía cubrir de veladuras de óleo muy diluido a pincel, usando un colorido en tonos pasteles que iba degradando con maestría.

La pieza ha sido adquirida por un grupo de hermanos a un particular y posteriormente ha sido donada a la hermandad formando ya parte del patrimonio artístico de la corporación del Miércoles Santo.