Llevaba seis años trabajando fuera de Córdoba y añoraba volver e instalarse en su ciudad natal, y más cuando estaba a punto de nacer su primer hijo. Antonio José Santos es uno de los 9 beneficiarios de la convocatoria del 2018 del Pasaporte de vuelta, una de las líneas del programa para el Retorno del Talento, puesto en marcha en marcha en septiembre del 2018 por Fundecor, Fundación Universitaria para el desarrollo de la provincia de Córdoba, y patrocinado por la Diputación de Córdoba, que tiene por objeto facilitar el regreso a la provincia de personas que estén desarrollando su actividad laboral en el extranjero y deseen incorporarse al mercado laboral andaluz. Santos, de 35 años, cogió el pasaporte de Fundecor y hoy trabaja en la empresa Sepalo Software SL, ubicada en el polígono de las Quemadas, que le ha hecho un contrato indefinido y que le permite, gracias al teletrabajo, conciliar con su vida familiar en Montoro, donde reside.

Cuenta Antonio José Santos que estaba trabajando en una localidad cercana a Londres, Milton Keynes, en la empresa tecnológica del Banco de Santander. «Estaba contento, pero fui padre a finales del 2018 y entre que mi pareja y yo estábamos cansados del clima de allí, muy triste, y que antes habíamos estado en Madrid, por lo que llevábamos fuera de Córdoba 6 o 7 años, se juntó todo y decidimos volver», cuenta el joven, licenciado en ingeniería técnica de Informática de Gestión por la Universidad de Córdoba. Buscando por internet una empresa de informática en Córdoba donde poder integrarse en su vuelta a la ciudad, encontró el programa de Retorno del Talento y decidió informarse. «Me informaron de las bases, de que había que encontrar una empresa que aceptara mi perfil y me conectaron con Sepalo, donde me hicieron dos entrevistas», dice. Finalmente lo contrataron a primeros de agosto de este año. El programa le financió el billete de avión de vuelta y el traslado en tren desde Málaga, los gastos de la mudanza y el alojamiento no, porque ellos lo tenían en Montoro.

Antonio José Santos señala que «me alegro de haber tomado la decisión, estamos muy a gusto en Córdoba». Para él, lo más importante de programa es que te ponen en contacto con empresas de tu perfil, «lo que es mucho mejor y más cercano» que ir por tu cuenta. El propietario de la empresa Sepalo Software, Antonio Ramos, explica, por su parte, que «este programa nos ha facilitado localizar a personas con nivel tecnológico alto, que conocen el mercado e idiomas por haber trabajado fuera y con ganas de volver a su tierra natal». Esta empresa es una de las 30 que han participado en la convocatoria del 2018, todas ellas ubicadas en Córdoba capital y provincia. Sepalo Sofware es una firma joven, se creó hace solo 5 años y medio por seis socios cordobeses y hoy tiene contratadas a 18 personas de forma indefinida. Aunque Antonio José Santos es el primero que contratan mediante el programa de Retorno del Talento, Ramos señala que muchos de sus empleados son jóvenes estudiantes de Córdoba que han vuelto a la ciudad tras experiencias en otros puntos de España y en el extranjero. Además, acogen a estudiantes en prácticas durante seis meses procedentes del grado de ingeniería informática.

También ha vuelto a Córdoba Pedro Rubio Perales, un joven de 28 años que llevaba dos años trabajando en la República checa en la empresa Carrier, del grupo United Technology. Aunque estudió Historia en la Universidad de Córdoba, el destino quiso que, a través de Adecco, se arriesgase a irse a República Checa, en principio para un trabajo temporal de 6 meses, para trabajar en algo muy distinto a su graduación, la fabricación de equipos de climatización. «Empecé desde cero y en checo, y me he quedado dos años», explica. «Pero vi que se me acababa un ciclo allí, que ya había aprendido todo y quise probar suerte de vuelta», comenta. Entonces conoció el programa de Retorno del Talento y le pusieron en contacto con la empresa Ciatesa, de Montilla, del mismo grupo con el que trabajaba en República Checa, que le hizo un contrato por un año este verano.