Desde la firma del contrato de gestión del espacio por parte de la UTE Palacio de Congresos de Córdoba SL y Marva SA, que dirige el empresario Juan Salado, el pasado 16 de octubre, el Palacio de Congresos de Córdoba ha contado con la celebración de casi una decena de eventos. En tan solo un mes de gestión, la empresa gestora ha recibido un total de 53 peticiones de uso de espacio, abarcando desde el 2018 hasta el 2022, de los que un total de 19 -a fecha de hoy- se desarrollarán en lo que queda de año.

Con estos datos mostró ayer Juan Salado la gran acogida y expectación que ha provocado la reapertura del Palacio de Congresos en la ciudad, al presentar a los medios la renovada imagen del edificio, así como su propuesta de plan de negocio y plan estratégico. El empresario estuvo acompañado en su intervención por el presidente de CECO, Antonio Díaz, y por Carlos de Sebastián, vicepresidente de OPC España, presidente de OPC Madrid y CEO de Tilesa-Kenes Group Spain, como apoyo del proyecto que presenta el Palacio de Congresos de Córdoba; además de por Paola Andrea Pisa, consultora con diecinueve años de experiencia en el sector de la industria de reuniones y eventos y colaboradora de este espacio.

En su intervención, el representante de la empresa gestora quiso resaltar el carácter «integrador y dinamizador» que tiene este proyecto con respecto a la ciudad, además de la activa relación que se está llevando a cabo desde el Palacio con los servidores públicos y representantes del mercado, tanto local como a nivel nacional e internacional. Con respecto al carácter dinamizador de la economía de la ciudad, Salado destacó la generación de empleo que puede llegar a crear la actividad en este espacio, poniendo como ejemplo la generación de 45 puestos de trabajo para cubrir las necesidades de los últimos eventos celebrados, de seis empresas distintas.

El responsable de la UTE, que se plantea esta etapa de 18 años al frente del Palacio como un «proyecto de vida», estimó que su plan de negocio prevé hasta el 2024 una facturación de entre 3,5 y cinco millones de euros, para lo cual tendrían que pasar por el edificio una media de 65.000 personas al año «para que las cuentas cuadren». No obstante, insistió en que, por encima del negocio le mueve un objetivo social y un compromiso con la ciudad, de ahí que subrayase también la colaboración con Prode, «en todo lo relacionado a la inserción laboral de personas con discapacidad». Anunció, igualmente, que van a firmar una «alianza estratégica» con la CECO para que la confederación sea «prescriptora del palacio en todos los sectores empresariales».

Salado explicó también que no habrá una inauguración oficial al uso del Palacio, sino que se han planteado convocar unas 13 reuniones sectoriales, para ir presentando el nuevo proyecto. La primera, tras la prensa, será con la Universidad, con el hospital Reina Sofía, San Juan de Dios, e incluso con representantes de las tres religiones, el Obispado de Córdoba, a quien han presentado su plan, y las autoridades hebreas y musulmanas.

Carlos de Sebastián mostró su apoyo al Palacio de Congresos de Córdoba. «Con la remodelación y el nuevo modelo, Córdoba tiene un aspecto muy atractivo para todo tipo de eventos. Es una ciudad muy adecuada por la capacidad del Palacio», dijo. Por su parte, Antonio Díaz, presidente de CECO, mostró su apoyo a Salado, que «ha tenido una visión estratégica importantísima» y se alegró de que al fin «se van cumpliendo los hitos de la ciudad». Subrayó que «desde CECO hemos estado trabajando mucho para que esto fuera una realidad».