La obra pendiente del Templo Romano tendrá que esperar todavía más acumulando un nuevo retraso. La junta de gobierno local ha rechazado hoy la resolución del contrato de obra por mutuo acuerdo solicitado por la empresa adjudicataria de la reforma del Templo Romano, Arquepec S.L.U., que habría agilizado en parte el proceso administrativo. El Ayuntamiento de Córdoba se ha visto obligado a adoptar esa decisión después de que esta empresa no haya dado respuesta a los últimos requerimientos en este sentido. De este modo, la junta de gobierno local se ve obligado a cerrar esa posibilidad de una resolución de mutuo acuerdo del contrato y debe abrir un nuevo expediente para la resolución del mismo retasando algunas semanas más la conclusión de esta adjudicación. Hasta que eso no se produzca no podrá sacarse de nuevo a licitación el proyecto y contratar a una nueva empresa para que acometa lo que resta del proyecto vinculado al Plan Turístico de Grandes Ciudades.

La adjudicataria actual solo ha ejecutado una 12% de la obra, que quedó paralizada por completo durante la primavera del 2019, si bien desde el inicio de la reforma se produjeron paralizaciones y retrasos. De hecho, la empresa trató de ceder el proyecto a otra empresa, pero eso no fue posible porque la ejecución no alcanzaba el mínimo del 20% exigido para ello. Además, para complicar más la situación Arquepec se declaró en concurso de acreedores. El Ayuntamiento de Córdoba llevó a cabo en el verano del 2019 una limpieza del solar donde se exponen los restos del Templo Romano, para evitar su deterioro.

La actuación en el Templo Romano, que ejecutaba Arquepec y que iba a permitir pasear entre las columnas, empezó en julio del 2018 y tenía un plazo de ejecución inicial de cinco meses, pero en septiembre de aquel año quedó parada un par de semanas cuando la adjudicataria solicitó la primera modificación del proyecto.