La delegación de juventud y la delegación de pastoral vocacional de la diócesis de Córdoba han celebrado en la Catedral la tradicional Vigilia de la Inmaculada, un acto que comenzaba con una eucarística presidida por el obispo de Córdoba, Demetrio FernándezDemetrio Fernández, quien daba la bienvenida al nuevo año litúrgico que da comienzo el domingo.

El obispo ha recordado la necesidad de "estar vigilantes y pedir al Señor que no nos abandone, que nos restaure y cambie en nuestro corazón todo lo que haya que cambiar". "Que brille su rostro en nuestra vida y nos salve", según se destaca en un comunicado recogido por Europa Press.

El tiempo de Adviento, como ha comentado el pastor de la Diócesis, nos proclama que el "Señor viene y que salgamos a su encuentro", por lo que monseñor Demetrio Fernández ha pedido a los fieles que eliminen los obstáculos que hay en su corazón y con esperanza renovada. "Un encuentro que llenará tu vida de luz y de alegría", ha destacado.

En este sentido, el obispo ha subrayado la necesidad de no dejarse "adormilar" por el pecado, sino procurar poner el alma a la luz de la misericordia y del perdón de Dios. Él ha puesto en nuestras manos un proyecto de vida y de felicidad, por lo que no nos enrollemos con el dinero y otras cosas que nos enturbian", ha comentado.

Finalmente, ha concluido su homilía encomendando a los fieles a la Santísima Virgen en este tiempo de Adviento, tiempo mariano por excelencia, porque "es Ella la que lleva al mundo la alegría que es Jesucristo".