El obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, ha anunciado la próxima apertura, tras casi 20 meses de obras, de la nueva residencia de Cáritas Diocesana de Córdoba en Torrox (Málaga), que, bajo la misma denominación de 'Cristo Rey', se inaugurará como establecimiento hotelero, pero especialmente destinado para las vacaciones de los pobres.

Así lo ha destacado Demetrio Fernández, en una entrevista concedida a Europa Press, señalando que ahora volverá a ser un lugar de convivencias, de colonias y, en definitiva, de ocio y tiempo libre "para niños familias, grupos parroquiales" o movimientos con desventaja social, principalmente.

El obispo ha explicado que, en su momento y ante el grave deterioro de la antigua residencia, "situada en una finca bañada por el mar", se barajaron las alternativas de "venderla o rehabilitarla para los pobres", y Demetrio Fernández decidió lo segundo, aunque ello ha supuesto "un sacrificio", por la inversión que ha precisado, cercana a los 1,9 millones de euros.

Sin embargo, Demetrio Fernández entiende que merece la pena, pues, al margen del destino como alojamiento hotelero que tendrá, para el público en general, "fundamentalmente es para niños y familias con menos recursos, para que puedan ir al mar" de vacaciones, algo que no se puede permitir todo el mundo, según ha recordado.

Por eso ahora, según ha resaltado, después de 20 años cerrada, vuelve a abrir esta residencia, que es "una buena iniciativa de Cáritas en favor de los pobres", a los que "no solo hay que darles la bolsa de comida, sino que también hay que escucharlos, acompañarlos y, especialmente a los niños, facilitarles un lugar de diversión, de esparcimiento y de vacaciones, gratis o a un precio" que la parroquia correspondiente "pueda afrontar".

Demetrio Fernández ha señalado que la anterior residencia se deterioró de tal manera que "no tenía habitabilidad", mientras que el nuevo edificio es un hotel "en la playa", pero con la finalidad ya descrita, y que "este verano ya estará abierto para grupos informales", aunque desarrollará su actividad a lo largo de "todo el año", pues, no en vano, allí se disfruta "del mejor clima de Europa", y "se puede ir en octubre, noviembre, diciembre o en mayo, no hace falta que sea en verano", aunque es en la época estival "cuando las parroquias organizan las vacaciones para los niños y las familias" con menos recursos.

140 PLAZAS

El nuevo edificio, situado junto al Faro de Torrox Costa, cuya primera piedra puso el obispo el 6 de octubre de 2015, cuenta con más de 140 plazas hoteleras y dispone de una capilla que, cerrada, tiene capacidad para 100 personas, mientras que, abierta por uno de sus laterales, permitirá la asistencia a las celebraciones en torno a 400 personas.

La planta baja del nuevo establecimiento está dedicada a zonas comunes, mientras que las habitaciones se sitúan en la primera planta, disponiendo también de comedores, apartamentos y aparcamientos, entre otros servicios.

Ya en el acto de colocación de la primera piedra, el obispo señaló que el objetivo de la nueva residencia "es que todas aquellas personas que vengan puedan disfrutar, no solo del mejor clima de Europa, sino de una atención espiritual", en un edificio por el "Cáritas tanto ha luchado y ha gestionado durante décadas pasadas" y que está destinado, de forma preferente, a las personas más desfavorecidas, aunque también podrá acceder el mismo cualquier ciudadano cuando haya plazas disponibles.