El año 2018, el de la recuperación, puede resultar un espejismo si se compara con el 2019, momento en el que la construcción residencial no solo se frenó en Córdoba sino que se redujo a la mitad, al menos según recoge la última estadística del Ministerio de Fomento sobre vivienda de régimen libre, que pone de manifiesto un retroceso al que se sumará el que vendrá debido a la crisis por el coronavirus.

En el 2018, y según Fomento (que se basa en los visados de los arquitectos más un coeficiente corrector), echaron a andar obras para la edificación de 1.441 viviendas de régimen libre. Esa cantidad había sido la más alta en una década y superaba a la del 2009, cuando comenzó la edificación de 1.252. Diez años después de aquellos 1.252 pisos y uno después de los 1.441, en Córdoba empezaron a construirse solo 653, un 54% menos que en el 2018 y un 47% menos que en el 2009, siempre, según Fomento. Aunque no se trata de la cifra más baja de la serie histórica, que fue la de los 297 pisos del 2014, sí está entre las seis menores.

La estadística de Fomento refleja la evolución de la edificación residencial desde 1991. En la década que va de 1991 al 2000, la mayoría de los ejercicios acabaron con más de 2.000 pisos nuevos de régimen libre iniciados. Después, del 2000 al 2010, la cantidad aumentó, aunque se topó con la crisis. De empezar con ejercicios en los que se construían más de 3.000 viviendas, se subió a 5.000, 6.000 y 7.000, alcanzando el máximo histórico en el 2006, con 7.880. A partir de ahí, la edificación comenzó su ritmo descendente, que cambió durante 2015 y 2016, en los que ascendió de nuevo para volver a trastocarse en el 2017. Desde los 7.880 pisos del 2006 y los 653 del 2009 hay un abismo de un -91%.

Córdoba ocupa el sexto lugar de Andalucía en cuanto a viviendas iniciadas. En cambio, Málaga fue la que más actividad registró en el 2019, con 8.770.

La estadística de Fomento tiene otra vertiente, la de las viviendas terminadas, donde no hay tanta variación, ya que de las 681 del 2018 se pasó a 653, un 4% menos. Las peores cifras se dieron a partir del 2013, debido a que los ejercicios anteriores aún vivían de las rentas de los que les precedieron. El año con menos viviendas listas para estrenar fue el 2016, con 342. En cambio, el mejor fue el 2008, con 6.898, momento en el que concluyeron las viviendas promovidas en el 2006.