Los empleados de Tanatorios de Córdoba volvieron a protagonizar en el pleno una protesta para exigir la paralización del nuevo tanatorio, que un día antes había aprobado el consejo de administración de Cecosam, con seis votos a favor (PSOE, IU, Ganemos, Consejo del Movimiento Ciudadano, UGT y CCOO) y tres en contra (dos votos del PP y uno de UCOR). Los empleados, que criticaron a partes iguales a la alcaldesa y al primer teniente de alcalde (pidieron, junto a algunos empleados de Sadeco de la CGT, la dimisión de ambos), fueron de nuevo desalojados del salón de plenos.

De manera previa, la portavoz socialista, Carmen González, informó de que el proyecto del tanatorio, que Cecosam tiene previsto construir en el cementerio de San Rafael, sigue adelante, ya que cuenta con todos los parabienes administrativos y de financiación (también se aprobó el lunes solicitar un préstamo de 1,8 millones). La concejala del PSOE dijo sentirse sorprendida porque el PP «ponga en duda la profesionalidad de los trabajadores del Ayuntamiento» al sembrar incertidumbre sobre la tramitación de este proyecto.

El portavoz del PP, José María Bellido, por su parte, insistió en mantener dichas dudas sobre la tramitación administrativa del tanatorio y vaticinó que «en los tribunales, el Ayuntamiento recibirá un profundo revés, que pagaremos los cordobeses». «Le va a doler la cabeza a la próxima Corporación municipal con este proyecto», añadió. Bellido afirmó que «más allá del urbanismo» el problema se va a plantear por la competencia desleal que supondrá en el sector funerario, algo de lo que ya advirtió la Intervención en un informe. Cs, que no está en el consejo de administración de Cecosam, también criticó «la velocidad anormal» en la tramitación del expediente y su «opacidad»; mientras que UCOR se posicionó en contra de cambiar «un monopolio privado por un monopolio público» que es lo que, a su parecer, va a pasar.

Por contra, PSOE, IU y Ganemos defendieron la idoneidad del proyecto, que dicen cumple con todos los requisitos y no incurre en competencia desleal contra el sector privado. Además, creen que será beneficioso porque reducirá el precio y dará trabajo a las funerarias pequeñas, que no pueden operar en Tanatorios de Córdoba.