La delegada de Medio Ambiente e Infraestructuras del Ayuntamiento de Córdoba, Amparo Pernichi, presentó ayer los programas de Ecoescuelas y Noches en el zoo para este verano, ambos dirigidos al público infantil y pensados para el disfrute en familia. La iniciativa, que lleva ya varios años organizándose desde el Consistorio, ha contado siempre con una «buena acogida», en palabras de la delegada, que afirmó que el año pasado «se llenaron las plazas en todas las jornadas y tanto padres como niños salieron muy contentos».

El programa de Noches en el zoo está previsto para las noches del 30 de junio y del 21 de julio, aunque, según Pernichi, «si hay algún otro grupo de más de 20 personas que solicite hacer la actividad en cualquier otra noche del verano, se podrán ampliar estas fechas». La actividad incluirá una gymkana nocturna para descubrir el zoo por la noche y en la que los niños estarán vigilados en todo momento por los cuidadores del recinto. Este año se espera que se pueda entrar en el cubil de un animal depredador «contando con toda la precaución y protección necesaria y en compañía de los cuidadores», ha aclarado la delegada. En la iniciativa podrán participar los niños que tengan, como mínimo, cuatro años, y deberán ir acompañados de sus padres. Los niños de a partir de ocho años podrán ir a la actividad sin su compañía.

Por otra parte, el programa de Ecoescuelas para verano (que también se organiza en Navidad y Semana Santa) se desarrollará desde el 26 hasta el 30 de junio (ambas fechas incluidas) y está orientado a niños de entre seis y doce años. Esta actividad será matinal y tiene por objeto «que los niños y niñas vivan el día a día en el zoo», y contará con «talleres de educación ambiental, juegos, entradas en los cubiles de algunos animales, visitas educativas y algunas proyecciones».

Además, según la delegada, el 20% de las plazas para cada actividad serán ofrecidas directamente a servicios sociales para «aquellas personas que no puedan permitirse pagar el coste de las mismas».

Ambas iniciativas tienen como principal objetivo concienciar a los más pequeños de la importancia de la conservación y la protección del medio ambiente, haciendo especial hincapié en la pérdida de hábitats por parte del ser humano.