Entre un 20% y un 30% de los pacientes ingresados en hospitales de gran magnitud, caso del Reina Sofía de Córdoba, sufren un problema que antes pasaba algo desapercibido durante la asistencia hospitalaria. Se trata de la hiponatremia (disminución de las cifras de sodio en sangre por debajo de las recomendadas). "Sin embargo, teniendo en cuenta que diversos estudios epidemiológicos asocian la hiponatremia con el aumento de la mortalidad, con la mayor presencia de enfermedad y con una duración más prolongada de las hospitalizaciones, se está llevando a cabo una detección más precisa de este déficit de sodio en los hospitales y en otro tipo de centros sanitarios y de mayores. Sobre todo en la población mayor que padece esta descompensación", señala el jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital Reina Sofía, Rafael Guerrero. Esta mayor búsqueda y diagnóstico de la hiponatremia se debe a que la esperanza de vida es cada vez mayor y por consiguiente crece el número de personas mayores. La principal causa de la hiponatremia es el síndrome de secreción inadecuada de la hormona antidiurética, "que nunca es asintomático y puede alertar a su vez de la presencia de otras patologías ocultas", recalca Guerrero. Este síndrome puede estar asociado a trastornos cardiacos o neurológicos y para corregirlo es necesario tomar una medicación adecuada.

Consecuencias

Este intensivista precisa que "esta descompensación del sodio en el organismo se suele instaurar con mucha rapidez y da lugar a déficit de la atención, dificultad para concentrarse, cansancio, cefaleas, irritabilidad e incluso causar la muerte, siendo la mortalidad entre 40 y 60 veces superior entre quienes sufren este problema frente a los que no lo presentan. Por eso, cuando un enfermo hospitalizado parece que tiene pérdidas de memoria hay que descartar primero que sufra un déficit de sodio, porque a veces corrigiéndolo la situación cognitiva vuelve a ser normal. Está el caso de personas mayores a las que se les va un poco la cabeza, se caen y sufren una fractura, y a lo mejor la causa de esa situación es hiponatremia crónica".

Recientes estudios científicos determinan precisamente que si existe déficit de sodio es mayor el riesgo de fracturas y de trastornos cognitivos, de ahí la importancia de detectar tempranamente este problema.