Las mujeres jóvenes vieron cómo sus probabilidades de abandonar el hogar familiar empeoraban en mayor medida que las de los hombres jóvenes en el primer semestre de 2020, puesto que su tasa de emancipación residencial descendió 1,5 puntos porcentuales en comparación con el cuarto trimestre de 2019, frente a los 1,2 puntos de los hombres jóvenes.

Sin embargo, el contraste de la tasa de emancipación residencial entre mujeres y hombres siguió siendo notable (20,8% para las mujeres y 14,0% para los hombres), así como la desproporción en el peso relativo de los hogares unipersonales: mientras que en el segundo trimestre de 2020 tan solo el 12,9% de las mujeres jóvenes emancipadas vivía sola, prácticamente uno de cada cuatro hombres jóvenes lo había conseguido (24,8%). Así lo ha confirmado el último balance del Observatorio de la Emancipación del Consejo de la Juventud de España.

Solo en la franja de edad de entre 16 y 29 años en España, un total de 694.010 mujeres habría logrado emanciparse; frente a 484.554 hombres de las mismas edades. Aunque se observa que el número de mujeres es mayor que el de los hombres, durante el primer semestre de 2020, se habría producido un receso del 5,71% con respecto a las mujeres emancipadas el año anterior, frente a un 3,60% menos de hombres. Otra de las grandes diferencias en esta franja de edad también se manifiesta en los hogares jóvenes, donde 339.936 mujeres son la «persona de referencia» de una vivienda en la EPA, habiendo descendido en un 1,61% con respecto al año anterior y frente a un aumento del 0,48% en el caso de los hombres.