La Mesa del Regadío reclamó ayer a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir los 228 hectómetros cúbicos más que le corresponden a la provincia de Córdoba desde 1998. La Delegación de Agricultura de la Junta de Andalucía, Asaja, COAG, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) y las cooperativas agroalimentarias de Andalucía demandaron por unanimidad recuperar esa cantidad hídrica, que supondría poner en riego 150.000 hectáreas de olivar en la provincia.

Según el delegado de Agricultura, Francisco Zurera, la pérdida de esos 228 hectómetros cúbicos de Córdoba se ha ido produciendo por «ser más disciplinados que otras provincias y creernos que la cuenca es deficitaria, cuando no es correcto, puesto que Córdoba precisa más riegos y hay otras provincias que amplían sus regadíos», y añadió que «no se va contra nadie, ni contra nada, pero sí se defiende al sector agrario cordobés». La Mesa de Regadío se constituyó en mayo del año pasado y ayer hizo balance de la situación, siendo una de las conclusiones «la necesidad de que la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir amplíe las zonas de regadío en Córdoba». Otra de las demandas de la mesa es que se concedan permisos para poner en marcha balsas de almacenamiento, aprovechar las aguas residuales y escorrentías de invierno, junto con la legalización de pozos de acuíferos.

Para el secretario general de UPA, Miguel Cobos, es preciso que los ayuntamientos se adhieran a las demandas de la mesa; mientras que para el presidente de Asaja, Ignacio Fernández de Mesa, es necesario el apoyo de las comunidades de regantes y de los privados. Para la secretaria general de COAG, Carmen Quintero, hay que gestionar el agua de forma eficiente y el mantenimiento de pantanos y canales de riego. Por último, el presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Andalucía, Rafael Sánchez de Puerta, insistió en que hoy no se puede mantener la agricultura de secano y el agua debe de llegar a la mayor superficie posible.