Dolores Ventura, Lola, como le gusta que la nombren, es la delegada de Alcaldía en el barrio periférico de Santa Cruz, que se segregó de Montilla hace 22 años para integrarse en la ciudad de Córdoba. Esta decisión, señala la delegada, trajo bastantes cambios a Santa Cruz, sobre todo en lo que se refiere a la prestación de servicios municipales.
En este sentido subraya que, por ejemplo, ha habido una mejora considerable en cuestiones como el arreglo de calles y acerados, ya que solo falta por acondicionar parte de una vía, o en la calidad del agua que consumen los santacruceños, «la misma que el resto de cordobeses», la de Emacsa, «una las mejores de España».
Además dejaron de tener cortes en el suministro durante los meses de verano, algo que ocurría de manera habitual hasta finales del pasado siglo.
Junto a ello, el barrio cuenta ahora con una nave municipal de uso polivalente que es el lugar de encuentro y de celebración de talleres y actividades del barrio, y el Ayuntamiento ya ha anunciado que arreglará camino que une Córdoba con el yacimiento de Ategua. Ahora lo que esperan los vecinos es conseguir unas instalaciones deportivas para Santa Cruz.
