La lluvia caída en Córdoba desde el inicio del año agrícola, el 1 de septiembre pasado, se han reducido a una tercera parte de media, según los datos facilitados por la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). El caso más llamativo es el del pantano de Guadanuño, que hasta mediados de este mes cuenta con 463,5 metros cúbicos de agua caída, frente a los 727,0 que se considera normal, lo que supone un descenso del 36% de la lluvia. En la misma línea se encuentran la capital, Villanueva de Córdoba y Doña Mencía, poblaciones que tienen unas precipitaciones anuales de media de 578,4 litros, 553,0 y 521,5 respectivamente, mientras que en lo que va de año agrícola las mediciones pluviométricas han sido de 384,3, 369,0 y 337,0 litros.

Esta disminución del agua procedente de lluvia pone en una situación de alerta al campo en Córdoba, y más cuando el verano acaba de iniciarse, entrando en un periodo en el que lo normal es que no llueva durante los dos próximos meses, aunque la situación se ha visto aliviada por las temperaturas suaves de este mes de junio. Esta necesidad de lluvia hace apremiante que la otoñada se adelante.