Teresa Fernández, madre de Sofía, una bebé de seis días nacida por parto natural en el Reina Sofía, se ha decantado, por segunda vez, por la lactancia natural «por los numerosos beneficios que conlleva para el bebé y para mi». La cordobesa afirma que se siente más segura amamantando por sí misma a su hija, ya que «protejo el desarrollo inmunológico de Sofía». Además, «por experiencia propia con mi primera hija, he notado que con la lactancia natural me recuperé más rápidamente del parto».Por estas razones, Teresa asegura que le dará el pecho a Sofía durante los 6 meses e, incluso, «me gustaría hacerlo hasta cuando me sea posible».

La supervisora de maternidad de Reina Sofia, Mª José Tapia, destaca la importancia de la formación de las madres durante el embarazo -normalmente, a los 7 meses-, después del parto y durante el periodo de lactancia, así como la atención primaria de los profesionales. Una vez la madre tenga claro si desea lactar o no en el momento que nace el bebé, debe redactar el Plan de Parto del sistema sanitario público, donde manifestará sus deseos y preferencias sobre la atención primaria que desean recibir durante y después del parto. La asociación Almamar se reúne cada martes en este centro para comentar dudas durante el periodo de lactancia.

Lourdes del Río, supervisora del servicio de Neonatos de Reina Sofía subraya que el método canguro se puede practicar con niños prematuros, «a pesar de que no haya desarrollado aún el reflejo de succión», y «se puede complementar con un chupete para adquirir este reflejo». Del Río explica que el siguiente paso para el neonato es aprender cómo tragar y esto «se estimula con este método, ya que cuando el bebé trepa hasta el pecho favorece la secreción». Del Río subraya que «este método ha de practicarse en un espacio tranquilo». Por ello, el hospital ha ampliado los horarios de visitas de los familiares y ha mejorado la comodidad de su sala de espera.

La matrona referente en lactancia en Reina Sofía hace hincapié en las líneas de mejora de la lactancia natural, y destaca que «no venimos de la cultura de amamantar» pero «las mujeres debemos conocer y respetar nuestra naturaleza». Vega resalta que «tenemos que empoderar a las madres», ya que «una mamá bien informada y con apoyo en casa puede lactar hasta que ella estime oportuno, incluso dos años». La especialista subraya que «la lactancia va cambiando», adaptándose a las necesidades del bebé. Por ello, «las madres deben comprender que cuando el niño cumple un año la sustancia química de la leche aumenta aportando más calorías».