Francisco Gómez Sanmiguel despide su mandato como presidente de la Agrupación de Cofradías, que finaliza el próximo año, con una magna nazarena, evento que el dirigente cofrade califica de «irrepetible».

-Otra magna más…

-Otra magna más, y una magna diferente. Si en principio fue el vía crucis magno, después fue la magna rociera y la magna mariana. Ahora se trata de una magna con motivo de la celebración de una serie de efemérides, como el 90 aniversario de la consagración de Córdoba al Sagrado Corazón de Jesús, el año jubilar de San Juan de Ávila, la coronación canónica de la Virgen de la Fuensanta (que cumple 25 años), y a esto se ha sumado el 75 aniversario de la Agrupación de Cofradías. Los traslados van a ser de diversas clases, uno de ellos va a ser en procesión, que es el que va a reunir un mayor número de imágenes, pero realmente lo que es magno es la gran exposición que se va a celebrar en la Catedral entre los días 15 y 22 de septiembre.

-¿Por qué nazarena?

-En el aniversario del Sagrado Corazón se planteó por parte de nuestro obispo la celebración de un gran acto cofrade, que tuviera como centro a Jesús. Enseguida se vio que la devoción de Jesús Nazareno es una de las devociones más extendidas y más arraigadas en la provincia y se decidió que fuese una magna centrada en la figura de Jesús Nazareno. A eso se sumó el 75 aniversario de la agrupación y dado que la Agrupación de Cofradías era la que organizaba este evento, decidimos incorporar a todas las hermandades de la capital que lo quisieran a este acontecimiento. De esa forma comienza a configurarse esta exposición magna.

-¿En qué es diferente esta magna a las anteriores?, ¿es más complicada?

-Es más complicada porque lleva dos partes: la parte procesional, el discurrir de los distintos pasos por las calles, hasta llegar a la catedral, y la parte expositiva, que tiene una gran complejidad. Hay que tener en cuenta que el templo en el que se va a acoger la exposición es un templo extraordinario y único. También es único en cuanto a sus características: las arcadas no son iguales de tamaño; hay zonas que están huecas por debajo del suelo, con lo cual tampoco se pueden ubicar los pasos; las distancias de los tronos y pasos que van a participar son muy diferentes; las alturas, también. Todo esto ha llevado una labor muy compleja, como si se estuviese haciendo un puzzle, en donde cada pieza tiene que encajar en un sitio. La organización es bastante más compleja que las anteriores, en las que solamente se estaba centrado en el aspecto procesional y luego cada imagen volvía a su templo. En este caso se van a quedar en la Catedral, donde van a ser expuestas.

-¿Cómo encaja la carrera oficial de la magna con la de la Semana Santa?

-La carrera oficial para la parte de la procesión de la magna es la misma que se utiliza en Semana Santa desde hace tres años. La diferencia es que en este caso no va con palcos ni estructuras. Eso plantea un pequeño hándicap. Por un lado van a entrar más sillas, pero por otro lado hay zonas en las que no se va a poder poner. Esto supone una labor de organización a la hora de dar forma a la carrera oficial. Al final va a resultar muy bien, como resulta en cada Semana Santa. El único inconveniente es que el número de sillas del que vamos a disponer no es el número elevado que nos haría falta para poder acoger este acto.

-¿Va a ser más complejo al participar más pasos?

-Son muchos pasos los que van a procesionar el mismo día. Para evitar esto se han hecho cortejos muy reducidos. Van a estar formados por diez parejas de cirios, una presidencia, una cruz de guía con dos o cuatro faroles, un fiscal de hora, un estandarte con dos o cuatro varas, el cuerpo de acólitos, el fiscal de paso y el paso con el grupo de capataces. También llevaran acompañamiento musical, que se retirará antes de entrar en el recorrido común, donde habrá un acompañamiento musical común para todas las hermandades. Las personas que acompañen a las hermandades tendrán que retirarse en determinados puntos. Está previsto que el tiempo entre cada uno de los pasos sea de siete minutos. Por este motivo, el acceso a la carrera oficial se hace por tres puntos: por el Puente Romano, por la avenida del Alcázar y por Ronda de Isasa. Esto permite ir alternando la llegada de los distintos pasos a la hora de entrar en el recorrido común que es la Puerta del Puente.

-Nunca antes habían coincidido tantos pasos juntos en Córdoba.

-Superamos la cifra del vía crucis magno y la de la magna mariana. La procesión de ida de los pasos a la catedral supera lo que hasta ahora hemos desarrollado en otras magnas.

-Un día en el que va a aumentar la población cordobesa considerablemente.

-Sí. Se están barajando cifras de entre 180.000 y 200.000 personas. Es un hándicap, pero los servicios municipales están advertidos. Se toman todas las precauciones. Se lleva trabajando muchos meses en este sentido, con las distintas áreas municipales, con Policía Local, Policía Nacional. Todo se está ajustando para que esta jornada sea festiva en torno a las hermandades de Córdoba y de la provincia y que no quede ningún cabo suelto. En un acto de estas dimensiones es posible que haya algún desajuste, pero todo se está planteando para que no existan esos desajustes.

-¿Cuántas sillas se van a poner?

-Al no existir estructura de palcos las sillas no se van a colocar en todos los lugares de la carrera oficial, por lo que aproximadamente habrá entre 4.000 o 5.000 sillas. Habrá un número de sillas que se pondrán a la venta el mismo día de la procesión. De la misma forma que se han puesto las localidades por internet, se hará una reserva de sillas para que se vendan ese mismo día en una taquilla que se instalará en el acceso a ese recorrido oficial. Las sillas van a ser insuficientes para tanta demanda.

-¿Se le presta poca importancia a la exposición?

-Lo trascendental es la exposición magna, que va a recoger las 43 imágenes y los 43 pasos. Lo importante son las imágenes sobre sus pasos o sus tronos procesionales. Exposiciones de arte sacro las ha habido y las seguirá habiendo, pero lo que realmente es grandioso es el marco incomparable que la acoge, después la calidad de las piezas, que vienen en todo su esplendor, en sus pasos procesionales. El evento magno es la exposición. Antes hablábamos de la procesión de traslado de las imágenes para participar en esa exposición. Hago hincapié en que lo realmente grandioso va a ser ver los 43 pasos ubicados en un templo único como es la Mezquita Catedral. La exposición es muy compleja porque el edificio es único, pero esa unicidad, esa exclusividad que tiene el edificio hace que tenga unas características únicas. Es un edificio que ha ido creciendo a lo largo de los siglos y las partes que se han ido incorporando son distintas a las partes anteriores, si no en su apariencia física, sí en su estructura. Todas estas características que hacen único este monumento han configurado también esta exposición, que se ha tenido que ir adaptado a ese espacio único. Lo realmente excepcional es poder ver esta exposición más allá de la procesión del día 14, que quizás sea lo más espectacular de puertas hacia afuera, pero lo realmente importante es la exposición, conseguir reunir durante una semana todas esas obras de arte que van a estar acogidas allí. Hay que hacer hincapié en el esfuerzo y sacrificio de todas las localidades que participan, que nos han dejado lo más valioso que tienen, que son sus titulares, sus devociones. Es algo que probablemente, no te voy a decir que sea irrepetible, pero sí que es muy difícil que se vuelva a repetir más, más adelante en un futuro.

-¿Cuál será el coste?

-A día de hoy no están cerrados todos los presupuestos. Hemos contado para la financiación con el respaldo del Cabildo Catedral, que va a ser muy generoso para que esta exposición se pueda llevar a cabo. Todavía hay partes abiertas y parece que se va a retransmitir por televisión, es decir, hay aspectos que todavía no están cerrados que pueden hacer que suba o baje ese presupuesto. También contamos con la posibilidad de patrocinadores externos. Es un evento costoso que no se podría llevar a cabo si el Cabildo Catedral no colaborara.

-¿Qué se cubrirá con la venta de sillas?

-No da para cubrir todos los gastos. Hay que tener en cuenta que se van a trasladar imágenes, se van a asegurar esas imágenes en los traslados. Hay imágenes que son obras de arte que requieren un traslado especial. A las hermandades hay que darles una cantidad para afrontar los gastos de la procesión. Es una exposición que será cara y que no podría haberse llevado a cabo si el Cabildo no hubiese colaborado.

-¿Habrá piezas aseguradas en un valor alto?

-A la hora de asegurar, una cosa es la devoción y otra el valor real de la realización de una imagen. No se puede sustituir el valor sentimental y artístico de un Juan de Mesa por una copia, pero el seguro lo que te asegura es el valor de sustitución de esa imagen. Los seguros se han gestionado de una manera grupal, con lo cual, al ser muchas hermandades, se obtiene un precio más asequible. En el caso de la exposición de la Catedral, esta tiene sus propios seguros y se está trabajando en que mientras las imágenes estén allí, mediante una adenda a ese seguro, se cubran también estas imágenes. Las imágenes están aseguradas desde que salen de su templo hasta que regresan.

-¿Y el apoyo del Cabildo?

-El comportamiento del Cabildo ha sido ejemplar. Nos ha apoyado desde el momento uno. Nuestro obispo nos animó a hacer esta exposición. Sin la aportación del Cabildo esta exposición sería imposible de realizar.

-En la magna se juntan valores religiosos, devoción popular y arte.

-Como Agrupación de Cofradías, la magna parte como un acto religioso. Volvemos a poner en valor ese valor catequético que tienen las imágenes de las cofradías. La exposición va a ser una enorme catequesis plástica centrada en la misión redentora de Jesús. A partir de ahí, existe otra serie de connotaciones. La connotación artística es importante porque estamos hablando de piezas que abarcan prácticamente desde el gótico hasta nuestros días. Vamos a tener obras de arte impresionantes. Pero para nosotros es un acto religioso en conmemoración de una serie de efemérides religiosas que se entiende desde nuestra diócesis que es interesante poner en valor.

-¿Es la magna la aportación más importante de las hermandades fuera de Cuaresma?

-Hasta ahora se han ido celebrando elementos particulares. La magna, lo grandioso que tiene es que son 41 hermandades participando en un elemento religioso común. Esto trasciende a lo que puede ser una celebración individual de una sola hermandad. Son muchas hermandades trabajando en conjunto y las que van a poner sus pasos en la calle en estos días, que van a estar una semana expuestos en la Catedral. Fuera de Cuaresma este puede ser uno de los eventos más importantes que se hayan hecho hasta ahora en la ciudad desde el punto de vista religioso. Yo siempre me quedaré como evento importante de esta agrupación el traslado de la carrera oficial de Semana Santa a la Catedral. Pero fuera de este evento, este tipo de eventos magnos tienen una repercusión muy importante tanto dentro como fuera de Córdoba.

-¿Es importante la magna para el turismo religioso en Córdoba?

-Por lo pronto, va a llenar los hoteles. Y no solo esto. Si entras en páginas como booking.com, como hoteles.com y otras, los precios de las habitaciones de los hoteles están desorbitados. Hoy, una habitación en Córdoba para el día del traslado de los pasos no se va a encontrar barata. La magna es una fuente de riqueza impresionante para la ciudad. Genera muchas posibilidades económicas. Lo que ocurre es que este tipo de eventos no se pueden hacer todos los días. Esto es una cosa extraordinaria y si incidimos en lo extraordinario acaba por convertirse en ordinario y deja de llamar la atención. Esto no debería ser yo quien lo valore, lo tienen que valorar los hosteleros.

-¿Qué potencial tiene Córdoba para este tipo de celebraciones?

-Ahora mismo quizás convenga descansar algunos años antes de volver a plantear otro evento de este tipo. Quizás sea bueno, cuando pase esta exposición magna, dejar un tiempo para que tome poso el tema de organización de este tipo de eventos, y cuando se haga otro, que tenga la misma fuerza que está teniendo este. Córdoba tiene muchísimo potencial en cuanto a sus cofradías. Una magna que nunca se ha hecho ha sido la de pasos de palio de las hermandades cordobesas, de imágenes marianas. Se podría hacer otra magna centrada en la figura del Crucificado. Hay muchísimas posibilidades, pero ahora mismo creo que es el momento de parar. Recomendaría un período de tranquilidad. No es algo que se tenga que hacer cada dos o tres años. Las circunstancias, las coincidencias, han dado esto.

-¿Cómo será la seguridad?

-Tanto en seguridad, movilidad y asistencia sanitaria llevamos trabajando desde mayo con reuniones con Policía Local, Policía Nacional, Cruz Roja y Ayuntamiento, Guardia Civil y Protección Civil. Solo queda la junta local de seguridad, que se celebrará a primeros de septiembre y, una vez que se cierren todos los flecos, se darán más detalles. Jugamos con la ventaja de que no es la primera magna que organizamos, existe una experiencia previa y tampoco el sitio nos es desconocido. Hemos impuesto la creación del Cecop, donde están representantes de todas esas fuerzas.

-¿Qué recomendaría a los asistentes?

-Que vean a las distintas hermandades por distintos lugares. Que no sea todo abigarrarse alrededor del recorrido común. Las hermandades van a discurrir por entornos muy bellos de la ciudad, en los que van a proporcionar imágenes únicas. Que se tomen las cosas con paciencia, va a haber mucha gente ese día en la ciudad. Y que se preparen para ver una jornada única con unas imágenes impresionantes.