La biblioteca de los Jardines de la Agricultura, conocida también como de los Patos, es un proyecto que el Ministerio de Cultura presentó en diciembre del 2009 y que unos meses después, en mayo del 2010, logró la licencia de obras, pero que desde entonces no ha dado ni un paso más. Todo lo contrario, más bien ha dado marcha atrás, ya que a finales del 2010 perdió la partida que tenía asignada en los Presupuestos Generales del Estado, lo que hizo imposible el inicio de las obras en los plazos previstos. Aunque a pesar de ello el compromiso del anterior Gobierno (del PSOE) era reactivarla en el 2011, no lo hizo. Desde entonces, el proyecto fue perdiendo peso en las cuentas estatales hasta desaparecer de las del 2013, por lo que tras el cambio de gobierno, y con la crisis económica que se agudizaba, no ha corrido mejor suerte.

Desde esas fechas claves han pasado tres años y poco más se sabe de esta infraestructura anunciada a mitad de la década pasada, que tiene el solar preparado desde el 2009, con las catas arqueológicas realizadas y sin la rosaleda que daba vida a los jardines, que fue trasplantada ante el inicio inminente de las obras y a pesar de la polémica que suscitó en su día. El compromiso era devolver la rosaleda a los Jardines de la Agricultura cuando la biblioteca estuviera construida. Además, y como no han empezado las obras, la licencia otorgada por Urbanismo en mayo del 2010 está caducada. El año pasado, Cultura comunicó a Urbanismo que no retiraba la licencia por falta de presupuesto para iniciar las obras.

El edificio fue proyectado por Paredes Pedrosa Arquitectos, equipo que durante este tiempo ha visto cómo sí se hacía realidad otro proyecto suyo de similares características en Ceuta. El estudio de arquitectos ganó los concursos de ambas bibliotecas al mismo tiempo pero solo una ha prosperado, ya que la apertura de la de Ceuta está prevista para este año.

La imagen de los Jardines de la Agricultura con el solar vallado y lleno de jaramagos no pasa desapercibida para los vecinos de la zona. El presidente de la Federación Al--Zahara, José Rojas, lamenta que "es un espacio perdido", en referencia a la zona donde iba la rosaleda, que fue "el primer jardín botánico de la ciudad". La paralización de este proyecto fue "un jarro de agua fría más a las inversiones de Córdoba", añade Rojas, que quiere saber qué va a pasar con esta infraestructura tan necesaria, "si hay dinero, si ha desaparecido", y qué va a ocurrir con el solar.

Los vecinos esperan que la visita del ministro de Educación y Cultura, José Ignacio Wert, aclare algo sobre el futuro de este proyecto, si se impulsará en el 2014 o seguirá esperando a tiempos mejores.

La importancia de este proyecto radica también en la respuesta que con sus más de 7.000 metros cuadrados y su capacidad para albergar más de 250.000 fondos daría a la necesidad que tiene Córdoba de este tipo de infraestructura cultural. La actual biblioteca pública ocupa 1.200 metros y se encuentra en la calle Amador de los Ríos, en situación provisional desde mediados de los ochenta.