La Dirección General de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía mantiene su intención de iniciar «en breve» las exhumaciones en el cementerio de la Salud de Córdoba. Así lo confirmaron ayer fuentes de este organismo, que junto al Ministerio de Justicia y el Ayuntamiento de Córdoba, están impulsando este proceso en la capital cordobesa de la mano de la asociación Dejadnos Llorar. El impás de las elecciones y los trámites burocráticos --en la Junta están a la espera de un documento que tiene que aportar aún el Ayuntamiento-- han retrasado estos trabajos que estaban previstos para finales de noviembre y que las familias de las víctimas esperan con impaciencia. De este modo, aunque ayer no se precisó el día del comienzo de las catas, se dio por hecho que sucederá de manera inmediata.
Precisamente ayer, la alcaldesa, Isabel Ambrosio, descubrió una placa en el hall del Ayuntamiento en memoria de los 81 empleados municipales represaliados por el franquismo. «No les podemos devolver la vida, pero sí la memoria y el honor», afirmó la regidora. Este acto, al que asistieron representantes de todos los grupos municipales, se suma al que se realizó este verano --con el descubrimiento de una placa en la fachada de Capitulares- en recuerdo del alcalde Sánchez Badajoz, fusilado el 7 de agosto de 1936, y los 19 concejales asesinados. Al descubrimiento de la placa asistieron, entre otros, el exalcalde Herminio Trigo y el presidente de Dejadnos Llorar, Antonio Deza, y se agradeció el trabajo realizado por Ana Verdú, la directora del Archivo.
