La Junta de Andalucía ha detectado en lo que va de año un total de 191 casos de menores en riesgo de exclusión. Se trata de casos de jóvenes en los que se detectan actitudes que podrían suponer un riesgo para su desarrollo personal y de integración social, sin que lleguen, necesariamente, a delinquir, explicó la delegada del Gobierno andaluz en Córdoba, Esther Ruiz. Una vez detectados estos casos, se ponen en marcha las actuaciones para la protección y la custodia de los menores de la Policía Autonómica, explicó la delegada.

Para formar acerca de los protocolos de actuación en estos casos, se celebraron ayer en la sede de la unidad de Policía adscrita a la Junta de Andalucía la segunda jornada sobre Intervención con Menores de Protección, a la que asistieron unos 60 profesionales de los distintos cuerpos de seguridad que trabajan en esta materia, policías Nacional, Local y Autonómica y Guardia Civil de tres provincias, Córdoba, Jaén y Granada, según explicó Antonio Montserrat, jefe de la Comisaría de la Unidad Adscrita en Córdoba.

El ponente, Antonio Burgos, jefe de la Unidad de Sevilla, explicó que los casos a los que se refieren las jornadas son menores que mendigan, con problemas de arraigo familiar o desprotección de algún tipo y que cuando se detecta el caso se pone en conocimiento de los servicios sociales municipales, que están bajo la coordinación del Servicio de Menores de la Junta, y se busca una plan de acción, bien en su propio entorno familiar bien en una familia de acogida o por cualquier otra vía, indicando que el internamiento en un centro es la última opción.

La delegada explicó que el área de menores de la Policía Autónoma «presta funciones de asistencia y protección, ya sea como víctimas de conductas ilícitas o por encontrarse en situaciones de riesgo y desamparo. Asimismo, la Policía de la Junta tiene competencias en otras materias como la protección del Medio Ambiente o atención a la mujer. Muchas de estas actuaciones se realizan en cooperación y coordinación con otras administraciones y cuerpos y fuerzas de seguridad».

Ruiz indicó que «especialmente en las situaciones de riesgo y desamparo, que suponen actuaciones que se desarrollan ajenas al ámbito penal, se demuestra el carácter asistencial de la Policía Autonómica que realiza un trabajo que a veces le resulta de una dureza extrema por las situaciones a las que se ven expuestos y el riesgo para esos menores».