El director general de Infraestructuras y Sistemas de la Consejería de Justicia e Interior de la Junta de Andalucía, Eduardo Tamarit, ha anunciado, a raíz del informe técnico emitido sobre el incidente del pasado 18 de octubre, cuando un juzgado de la Ciudad de la Justicia de Córdoba se vio afectado por la entrada de agua de lluvia durante una tormenta, que se ha determinado "comprobar todos los bajantes y limpiarlos adecuadamente".

En declaraciones a Europa Press, Tamarit ha explicado que esta es la principal decisión que se ha tomado tras comprobar que la citada entrada puntual de agua que sufrió el Juzgado de lo Social número 4 se debió a la "colmatación" de la azotea situada sobre dicha dependencia judicial, a causa de "un bajante, que contenía maleza, pues no estaba suficientemente limpio, y que había provocado el taponamiento de la salida de agua", acumulándose "cinco o seis centímetros de agua, que es la que causó todo el problema".

Una vez limpio dicho bajante, según ha detallado Tamarit, se ha comprobado que "funciona correctamente, que las juntas están bien selladas y que no hay ningún tipo de problema", más allá del que hubiera estado taponado parcialmente, razón por la que se ha "decidido comprobar todos los bajantes y limpiarlos adecuadamente", además de "estar atentos por si hay algún otro tipo de problema, aunque no se ha detectado nada más".

En este sentido, el director general de Infraestructuras y Sistemas de la Consejería de Justicia e Interior ha indicado que "es normal que en un edificio nuevo pueda haber alguna readaptación", si bien ha dicho esperar que en la Ciudad de la Justicia de Córdoba "no se produzca ningún otro tipo de problema más".

Fue en la madrugada del pasado 18 de octubre cuando el agua de lluvia de una fuerte tormenta afectó al mencionado juzgado, aunque su actividad, según aseguraron entonces desde la Junta de Andalucía, no se vio afectada, como tampoco la del resto de la Ciudad de la Justicia, que abrió en la mañana del miércoles 18 y estuvo celebrado juicios "con normalidad".

Ello fue posible entonces porque, "desde el primer momento en que se tuvo conocimiento" de las incidencias, "comenzaron los trabajos por parte del equipo de mantenimiento para solventarlas", procediendo a "la evacuación del agua y a la limpieza de la zona" que había resultado afectada, y "los trabajos concluyeron antes de que llegara el personal, con lo que este incidente" no tuvo "repercusión alguna en el servicio público" que presta dicho órgano judicial, ya que "abrió sus puertas", como estaba previsto, "a las nueve de la mañana".