La Becerrada Homenaje a la Mujer Cordobesa celebrada el domingo pasado en la plaza de Los Califas ha generado una polémica en las redes sociales y ha llegado, incluso, a periódicos extranjeros como el británico Daily Mail, que se ha hecho eco de este espectáculo cordobés. Sin embargo, fuentes de la Delegación del Gobierno de la Junta consultadas por este periódico insistieron ayer en subrayar que se trata de una actividad organizada por la Escuela Taurina en su sede y, por esto, es autorizada por sus servicios de espectáculos públicos.

Las mismas puntualizaron que la diferencia respecto a una corrida de toros al uso es que en este caso no tienen más competencia que conceder la autorización, por lo que el Gobierno regional no tiene «nada que ver» con lo que sucede en el coso. También hicieron hincapié en que los menores tienen el permiso de sus padres para participar en el evento, porque son alumnos de la Escuela Taurina. Así, resumieron su postura abundando en que «la actividad es legal y, por lo tanto, no nos podemos negar».

De su parte, el presidente del Círculo Taurino, Alfonso Téllez, hizo hincapié en que esta becerrada es una clase práctica de la Escuela Taurina y reclamó «respeto». En este sentido, aclaró que los alumnos que torearon los becerros son mayores de 14 años, tienen el permiso de la familia y un seguro, y cumplen los requisitos necesarios para poder participar. Sobre los niños pequeños que se observaron en el ruedo, comentó que son alumnos de la escuela y actúan a modo de alguaciles. Entre otras ideas, preguntado por el descenso del público asistente, manifestó que «la gente no va porque ahora mismo la afición está de capa caída».

Por otro lado, el coordinador de Pacma en Córdoba, Javier Luna, señaló que este evento «perjudica gravemente la imagen de la ciudad» y «pone a Córdoba como una de las ciudades a la cabeza del maltrato animal». En este sentido, detalló que «se torturan hasta la muerte a becerros de menos de dos años con la participación de novilleros menores de edad, se cortan orejas y rabos a animales vivos, y se permite que los menores entren en las plaza, teniendo que ver el asesinato de estos de forma violenta a pesar de desaconsejarlo el Comité de Derechos del Niño de la ONU». De este modo, Pacma anunció que seguirá «trabajando por una Córdoba libre de maltrato animal e instamos al Ayuntamiento a trabajar por ello».