Amarillo Limón es una empresa cordobesa especializada en ecommerce, en optimizar las ventas digitales de las empreasas. Fue creada por tres socios que venían de un proyecto común y que tenían ganas de ampliar horizontes llevando su trabajo a otros sectores. Hoy gestionan una veintena de proyectos, la mayoría de ellos de Córdoba.

¿Cuánto tardan en crecer un negocio que comienza a desarrollar una estrategia ecommerce?

Intentamos ser muy realistas y no vender humo. Cambiar o iniciar un proyecto digital no es algo que se consigue en uno o dos meses. Por eso intentamos dilatar en el tiempo lo máximo posible la capacidad de inversión que tiene un proyecto y no gastar todos nuestros esfuerzos los primeros meses porque sabemos que los resultados son malos. En ese primer periodo sentamos las bases y al noveno mes o cerca del año empezamos a invertir, pero con cabeza. Nosotros medimos absolutamente todo y para eso el mundo digital ofrece multitud de herramientas y siempre vamos a factores de rentabilidad, para ver lo que la empresa necesita y la inversión que tiene que hacer.

¿Por qué es importante contar con expertos en ecommerce para lanzar un negocio digital?

Porque cuando un proyecto empieza solemos decir que si hay algo que cambiar ‘ya lo mejoraremos’, pero si de primeras no se han hecho bien las cosas empiezan a fallar, a descontrolarse e incluso cualquier métrica puede no ser real, lo que nos lleva a tomar decisiones basándonos en datos erróneos. O se empieza de cero y se hace bien, o siempre va a estar arrastrando problemas que nunca te van a permitir dar ese salto de calidad.

¿Qué requisitos debe tener un proyecto que quiera lanzarse a lo digital con garantías de éxito?

Es muy importante el sector que estemos tratando, porque hay muchísima diferencia entre ellos. No es lo mismo un producto con nombre y apellido, como por ejemplo un modelo de un producto electrónico que en el buscador se busca de una manera y que está en todas las tiendas, o un producto propio. Para los primeros es fácil que se consiga una venta, porque al final lo que nos interesa es que haya búsquedas sobre el producto y si las hay, podemos poner los medios para que ese producto se venda. En cambio el producto propio requiere una inversión muchísimo más elevada, por la principal razón de que el público no va a buscar tu producto. Por ejemplo, si vendes un anillo de plata, anillos hay una infinidad. O el cliente esta buscando tu marca o es imposible competir entre la infinidad de productos similares.

¿Cómo está el nivel en Córdoba de empresas con ecommerce?

Nos sorprendió cuando montamos Amarillo Limón que había muchas empresas con posibilidades. Había un montón de proyectos que no eran muy conocidos pero que tenían una base muy sólida y lo que necesitaban era un empujoncito. En Córdoba hay materia prima, aunque nos hemos dado cuento que hay muchas agencias de marketing digital, cuyo trabajo se hace muy bien en Córdoba, pero no hemos encontrado ninguna especializada en ecommerce.

¿Qué diferencia hay entre el marketing digital y el ecommerce?

El primero es cualquier estrategia de marketing, de marca, que se realiza en el mundo digital, pero una estrategia de ecommerce es aquella que va dirigida a la venta y al ROAS (lo que mide el retorno de la inversión). Si conseguimos ventas rentables el proyecto irá bien.