La explanada del Palacio de la Merced, donde tiene su sede la Diputación Provincial, recibió ayer a más de quinientos asistentes en la jornada de convivencia organizada por la Federación de Casas Autonómicas, Provinciales y Locales, una actividad que supuso "el broche final" para las iniciativas que celebran a lo largo del año y que, según explicó el presidente de la entidad, Antonio Pino, era el escenario donde "reivindicar nuestra idiosincrasia".

La música, las carpas y el olor a comida conformaron un ambiente festivo en el que los socios de estos colectivos disfrutaron del encuentro. En la federación se integran, según precisó el presidente, las casas de Castilla La Mancha, Extremadura, Canarias, Castilla y León, Sevilla, Jaén, Cádiz, Aguilar de la Frontera, Belmez, Castro del Río, Valle de los Pedroches, Montilla, Puente Genil, Guadalcázar y Espejo. En el acto inaugural, Antonio Pino les recordó que "somos los representantes de nuestros pueblos" y detalló que no pudieron asistir todas las entidades, en algunos casos por motivos económicos.

La diputada de Consumo y Participación, Aurora Barbero, respondió a este problema avanzando que "el próximo año seguiremos colaborando e intentaremos que la partida sea mayor, para que las casas que hoy no han podido estar puedan hacerlo". Esta jornada también contó con la asistencia de la portavoz del gobierno local en el Ayuntamiento de Córdoba, Carmen González; de las diputadas Carmen Gómez (Turismo) y Marisa Ruz (Cultura), que fueron distinguidas como socias honoríficas de la Casa de Castro del Río (de donde son oriundas), y la diputada popular María Jesús Botella.