Un total de 2.548 botellas de ron falsificadas y otras 301 que incumplían la normativa de etiquetado han sido intervenidas por la Guardia Civil en una operación con ocho personas en calidad de investigadas y en la que se han inspeccionado ocho distribuidoras de bebidas en varias provincias, entre ellas Córdoba.

La investigación se inició en marzo de 2017, cuando los agentes, tras varias inspecciones en materia de alcohol en comercios minoristas, localizaron numerosas botellas de ron falsificadas y productos originales que no cumplían la normativa de etiquetado, ha informado hoy la Guardia Civil en un comunicado.

Tras las pesquisas fue localizado un empresario afincado en Sevilla que introducía en España la mercancía falsificada a precios muy inferiores a la distribuidora oficial, y se acreditaron, a través de las diferentes sociedades de este empresario, un total de 86.808 botellas de importación ilícita.

Los responsables introducían los productos haciéndolos pasar por originales y era casi imposible su detección para el consumidor, ya que las diferencias de embotellado eran prácticamente imperceptibles y eran necesarios análisis por un laboratorio para corroborar la falsificación del contenido.

Tras numerosas inspecciones y tomas de muestras en distribuidoras de Marbella (Málaga), San Roque (Cádiz), Córdoba, Sevilla y Mérida fueron incautadas 2.548 botellas falsificadas y 301 botellas por incumplir la normativa de etiquetado.

Además, se actuó contra los ocho propietarios de las distribuidoras en calidad de investigados por un delito contra la propiedad industrial y se han realizado varias denuncias por infracciones administrativas a la normativa de etiquetado.