Los empresarios hosteleros de Córdoba han acogido "con resignación" las medidas anunciadas este jueves por la Junta de Andalucía, que limitan el cierre a las 22 horas sus establecimientos en la capital cordobesa desde el domingo 25 de octubre y reducen de nuevo el aforo al 50%. Según ha destacado el presidente de Hostecor y de la Federación Andaluza de Empresarios de Hostelería, Fran de la Torre, "estamos resignados porque entendemos que lo sanitario prima y está por encima de lo económico".

Para el sector, "estas medidas vienen a acentuar la situación de pérdidas que llevamos sufriendo desde hace meses y de la que no hemos llegado a remontar en ningún momento", recuerda el presidente de Hostecor, que antes de realizar valoraciones concretas, estima ya que "el cierre de bares y restaurantes pase del 35% que preveíamos a al menos un 50% si esto se prolonga". Los hosteleros no entienden las medidas adoptadas, "ya que no se basan en evidencias sanitarias", ya que temen que el efecto será el contrario al deseado. "Mucho nos tememos que el cierre de bares potencie las reuniones familiares y las fiestas privadas, que son el verdadero foco de contagios en este momento, según los análisis científicos", recuerda mientras insisten en que "nuestros establecimientos tienen todas las medidas de seguridad establecidas, al contrario que otros espacios".

Según De la Torre, que se ha mostrado agradecido a la Junta de Andalucía "porque al menos, nos han reunido para comunicarnos la decisión y plantearnos la creación de una mesa sectorial para analizar la situación y buscar soluciones". Los hosteleros confían en que la administración canalice algún tipo de ayuda para los afectados en esa mesa de análisis, que se reunirá por primera vez la semana que viene, según ha adelantado. El sector cree que es posible habilitar algunas ayudas que aporten "no solo financiación pura y dura sino rebajas en los alquileres, moratorias o cualquier medida que pueda amortiguar las pérdidas a las que nos enfrentamos". En Hostecor, "muchos compañeros han planteado su intención de acogerse de nuevo a ERTES".

La situación es especialmente grave en los restaurantes que están centrados casi en exclusiva en los servicios de cena. "En esos casos, es imposible que puedan servir una cena y cerrar a las diez de la noche", ha explicado De la Torre.